
EL VENEZOLANO COLOMBIA
Miles de venezolanos enfrentan una situación crítica al intentar regresar a su país desde el extranjero, especialmente desde Estados Unidos, debido a la falta de documentos válidos. La Embajada de Venezuela en México, una de las pocas opciones para tramitar salvoconductos, ha suspendido su emisión, dejando a muchos en un limbo migratorio.
Esta medida, sumada a la inoperatividad de plataformas digitales y la falta de respuesta consular, agrava el desamparo de quienes, sin pasaporte ni cédula, buscan volver a su nación. La abogada Lorena Vargas, desde Ciudad de México, en entrevista realizada por el director de El Venezolano Colombia José Ramón Villalobos, expone la gravedad de este problema que vulnera derechos fundamentales.
El caos de los salvoconductos
El salvoconducto, conocido como “Constancia de viaje para cita Saime”, es un documento temporal para venezolanos sin pasaporte válido que desean retornar a Venezuela. Sin embargo, su emisión en la Embajada de México está suspendida para quienes residen fuera del país, como en Estados Unidos o Canadá.
Según Vargas, solo los venezolanos presentes en México pueden solicitarlo, y deben justificar su retorno con una carta de motivos, un requisito que contraviene el derecho constitucional de libre ingreso al país. Esta restricción deja a muchos sin opciones viables para viajar.
Una plataforma caída y sin respuestas
Hasta diciembre pasado, la página web de la Embajada (tramitesconsularesvenmex.com) permitía gestionar salvoconductos y otros trámites en línea, con pagos mediante tarjeta o criptomonedas. Sin embargo, este servicio fue deshabilitado sin alternativa clara. Los canales de comunicación, como WhatsApp, Telegram y correos electrónicos, han sido clausurados o no reciben respuesta, según denuncias.
Esta falta de acceso digital y atención consular dificulta que los migrantes, especialmente aquellos en situación irregular, resuelvan sus necesidades documentales.
Requisitos inalcanzables para los más vulnerables
Los salvoconductos están destinados a venezolanos sin documentación, como aquellos que perdieron su pasaporte en el Darién o cuya única prueba de identidad es una copia digital. Sin embargo, la Embajada exige boletos aéreos y, en algunos casos, ha rechazado solicitudes, causando pérdidas económicas a quienes adquieren pasajes sin garantía de obtener el documento. Vargas destaca que esta situación es particularmente grave para personas con órdenes de deportación o en situación de calle, quienes quedan atrapadas sin posibilidad de retorno.
Doble nacionalidad: Una excepción limitada
Quienes poseen doble nacionalidad pueden salir de su país de residencia con un pasaporte vigente de otra nacionalidad, pero deben ingresar a Venezuela con su pasaporte venezolano, aunque esté vencido. No obstante, para salir de Venezuela, se requiere un pasaporte vigente, lo que complica los planes de quienes buscan renovarlo en el país. La cédula, incluso vencida, permite viajes internos, pero no sustituye al pasaporte para vuelos internacionales, dejando a muchos sin soluciones prácticas.
Pasaportes: Retrasos y estafas
La renovación de pasaportes en México también enfrenta problemas. Desde noviembre, muchos pagaron 80 dólares por envíos a domicilio que nunca llegaron. Los documentos, en cambio, permanecen en la Embajada, obligando a los solicitantes a pagar nuevamente por servicios de mensajería como UPS o DHL para recuperarlos. Vargas apoya a los afectados enviando formularios y coordinando envíos, pero la falta de transparencia y los costos adicionales agravan la frustración de los migrantes.
La suspensión de salvoconductos y los retrasos en pasaportes reflejan una crisis de protección consular para los venezolanos en el exterior. Sin acceso a servicios básicos ni respuestas claras, muchos enfrentan un desamparo que viola tratados internacionales. La reactivación de plataformas digitales y una gestión transparente son urgentes para garantizar el derecho al retorno.