
EL VENEZOLANO COLOMBIA
Aunque las estadísticas oficiales muestran una reducción en la cantidad de denuncias por daño de vehículos, la percepción de inseguridad entre los ciudadanos continúa latente.
La capital colombiana enfrenta un desafío persistente: desarticular redes criminales que operan en sectores específicos, aprovechándose del descuido de los propietarios y de la vulnerabilidad en ciertos barrios.
Zonas residenciales, terreno fértil para los delincuentes
El barrio Castilla, en la localidad de Kennedy, encabeza la lista de sectores más afectados. Allí, recientemente, un conductor fue interceptado por tres individuos armados que lo obligaron a entregar su camioneta. Este tipo de situaciones se repite en otros seis puntos identificados por la Policía Metropolitana: Ciudad Kennedy, Galán, Ciudad Montes, Normandía, Madelena y Candelaria.
Las características comunes de estas zonas —calles estrechas, bahías descubiertas y viviendas con garajes a la vista— facilitan el accionar de los grupos delictivos, quienes ya han trazado rutas de vigilancia y reconocimiento.
Tácticas silenciosas y horarios críticos
Las autoridades han logrado perfilar con mayor precisión el procedimiento de las bandas. Entre las técnicas más frecuentes están el uso de llaves modificadas y el robo por descubierto, conocido como “jalado”. La mayoría de los casos se producen entre las 7 pm y la medianoche, y los fines de semana son los días más propensos a estos actos.
Un patrullero en terreno afirmó que muchos de los hurtos ocurren en zonas aparentemente tranquilas, donde los vehículos permanecen estacionados sin protección por largas horas. “Los delincuentes saben exactamente dónde buscar”, señaló.
Las marcas más codiciadas y la respuesta de la ciudadanía
Según informes oficiales, los modelos más afectados son de marcas como KIA, Chevrolet y Toyota, destacando líneas como el Picanto, Spark y Sportage, debido a su alta demanda en el mercado informal de repuestos. En enero de este año, Fasecolda reportó 422 reclamaciones por robo de automóviles y un incremento en la adquisición de pólizas con cobertura contra hurto.
Pese a esta mayor conciencia asegurada, el principal problema sigue siendo el mal estacionamiento: más de 500 comparandos se emitieron en solo dos meses por parqueo indebido en Kennedy.
Operativos y decomisos: la lucha continúa
Las fuerzas del orden han llevado a cabo importantes acciones, como la captura de una banda compuesta por 11 sujetos, a quienes se les atribuyen al menos 15 robos. También se descubrió una bodega en el centro de la ciudad con centenares de autopartes ilegales.
El general Giovanni Cristancho, comandante de la Policía de Bogotá, insistió en que el combate al hurto debe ir de la mano con la prevención ciudadana: “Cada vehículo sin seguridad básica representa una oportunidad para el crimen”.
