EL VENEZOLANO COLOMBIA
La crisis migratoria venezolana sigue intensificándose debido a los conflictos en la frontera con Colombia y la falta de apoyo internacional para los refugiados. Organizaciones y expertos advierten que, aunque la migración continúa, la atención sobre el tema ha disminuido, dejando a kilómetros de personas en situación de vulnerabilidad.
A esto se suma la reciente orden del presidente Donald Trump de frenar las ayudas federales a los programas de asistencia internacional, lo que podría limitar aún más los recursos destinados a los migrantes. Mientras tanto, la violencia en el Catatumbo y el auge del narcotráfico en la zona plantean nuevos desafíos para la seguridad y estabilidad en la región.
Falta de políticas y reducción de ayuda
Durante un foro de rendición de cuentas, el investigador Ronal Rodríguez señaló que actualmente no existe una estrategia clara para canalizar recursos hacia los migrantes venezolanos. Según el experto, la presión social es fundamental para mantener el tema en la agenda política, pues, con el paso del tiempo, el discurso sobre la migración ha perdido relevancia.
El gobierno de Trump ha anunciado una revisión de los fondos destinados a organizaciones nacionales e internacionales que atienden a refugiados. Según la política venezolana Gaby Arellano, refugiada en Colombia, la administración estadounidense tiene un papel clave para frenar la migración, pero para ello debe garantizar el respeto a la voluntad del pueblo venezolano expresada en las elecciones del 28 de julio.
La frontera como zona de tensión geopolítica
La región del Catatumbo se ha convertido en un punto de conflicto con alto impacto en la crisis migratoria. La presencia de grupos armados como el ELN y las disidencias de las FARC ha convertido esta zona en una de las más inestables de la región.
Según Arellano, la relación entre Gustavo Petro y Nicolás Maduro ha generado un escenario de impunidad que pone en riesgo la seguridad de la frontera. Advirtió que, de no tomar medidas, esta área podría convertirse en una versión latinoamericana de la “franja de Gaza”.
El narcotráfico en la región también juega un papel crucial en la crisis. Con cerca de 50.000 hectáreas de cultivo de coca en el Catatumbo, se estima que un kilogramo de cocaína puede venderse por hasta 25.000 dólares. Algunos analistas sugieren que Maduro, en alianza con el ELN, podría estar usando esta actividad como fuente de financiamiento ante la posible suspensión de licencias petroleras por parte de Estados Unidos.
Barreras para la integración de los migrantes
La falta de documentos es uno de los principales obstáculos para los venezolanos que llegan a Colombia. De acuerdo con un informe de la fundación, solo el 2,2 % de los migrantes cuentan con pasaporte, debido a los altos costos de emisión, que alcanzan los 320 dólares. Sin este documento, es difícil acceder a servicios básicos como salud, educación y empleo formal.
Además, la estigmatización de los migrantes es otro problema que dificulta su regularización e integración. La directora de Human Rights Watch para las Américas, Juanita Goebertus, advirtió que es peligroso generalizar a los migrantes como criminales, como lo ha hecho en algunas ocasiones el presidente Trump.
Un llamado a la acción
Las organizaciones de derechos humanos han solicitado a la Cancillería de Colombia que implemente políticas más efectivas para apoyar a los refugiados venezolanos. Asimismo, instantánea a la comunidad internacional a tomar medidas para garantizar el respeto a la decisión del pueblo venezolano en las elecciones.
Aunque el panorama sigue siendo complejo, los expertos sostienen que, con cooperación internacional y políticas adecuadas, es posible aliviar la crisis migratoria y mejorar las condiciones de vida de los migrantes en la región.
La crisis migratoria venezolana enfrenta nuevos desafíos con la reducción de la ayuda internacional y la creciente violencia en la frontera con Colombia. Mientras el gobierno de Trump revisa sus políticas de asistencia, la situación en el Catatumbo se agrava, aumentando la vulnerabilidad de los migrantes. Sin estrategias claras y apoyo internacional, miles de venezolanos seguirán enfrentando barreras para su integración y estabilidad en los países de acogida.