EL VENEZOLANO COLOMBIA
El 21 de octubre, 38 migrantes venezolanos desaparecieron en la ruta desde la isla de San Andrés hacia Nicaragua.
A medida que se cumplen 55 días de incertidumbre, las autoridades colombianas aún no logran determinar su paradero. Familiares, desesperados pero esperanzados, aguardan respuestas ante esta angustiosa situación.
La esperanza persiste
María José Sánchez, familiar de Myleden Al Kardy, una de las desaparecidas, expresa su constante esperanza a pesar del desconcierto y la falta de comunicación con su ser querido.
La desaparición de Myleden, quien buscaba reunirse con su familia en Estados Unidos, ha dejado a sus allegados en un estado de incertidumbre insoportable.
Inquietud y búsqueda de respuestas
En medio de la incertidumbre, la familia se siente limitada en su capacidad para actuar.
A pesar de sus esfuerzos por aportar información relevante, solicitar ayuda y seguir de cerca las investigaciones, el resultado final sigue siendo un enigma.
Investigaciones y lucha por respuestas
La Procuraduría General de Colombia, tras intensas investigaciones, no ha podido determinar si los desaparecidos partieron hacia Nicaragua o si fueron víctimas de tráfico de personas, aún permaneciendo en la isla de San Andrés.
La falta de respuestas a casi dos meses de su desaparición ha generado preocupación entre los familiares.
La desaparición de migrantes venezolanos en la ruta de San Andrés hacia Nicaragua ha generado una profunda angustia y desesperación entre sus familiares.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades y el compromiso de algunos grupos para esclarecer este caso, la incertidumbre persiste. Es esencial que se intensifiquen los esfuerzos de cooperación entre las autoridades locales e internacionales para esclarecer este suceso y brindar respuestas a los familiares afectados.
La atención continua y coordinada es crucial para resolver este desgarrador episodio y evitar tragedias similares en el futuro.
