Brecha educativa en Colombia: El 16% de los niños migrantes excluidos del sistema escolar

◉ La desescolarización responde a varios factores, entre ellos la falta de cupos en las instituciones, el bullying y la carencia de documentación

EL VENEZOLANO COLOMBIA

La falta de acceso a la educación es un desafío significativo para muchos niños migrantes en Colombia. En este caso, la historia de Deyris Castellano y su hija Oscaris ilustra la lucha que enfrentan para obtener un cupo en el sistema educativo.

A pesar del deseo ferviente de la pequeña de 12 años de asistir a la escuela y continuar con su formación académica, diversas barreras han dificultado su ingreso.

Barreras para el acceso a la educación

Deyris Castellano ha estado esperando más de doce meses para lograr un cupo escolar para su hija. Los requisitos exigidos por los colegios, como el carné de permanencia, el Sisbén y el RUN, han sido obstáculos insuperables para la familia.

Estas dificultades han llevado a la desescolarización de muchos niños migrantes en Colombia.

Causas de la desescolarización

La falta de cupos en las instituciones educativas, el bullying y la carencia de documentación son algunas de las causas que contribuyen a la desescolarización de los niños migrantes.

La movilidad constante y las situaciones familiares complejas también afectan la estabilidad en el proceso educativo de los estudiantes venezolanos en particular.

Necesidad de facilitar el acceso al sistema educativo

Para abordar este problema, es crucial que se implementen medidas que faciliten el acceso de los menores migrantes a las instituciones educativas.

Luis Eduardo Ríos, oficial de protección de Unicef, destaca la importancia de flexibilizar y acelerar los procesos de aprendizaje, considerando que muchos niños y niñas refugiados y migrantes han estado fuera del sistema durante dos años. Garantizar su permanencia en la jornada escolar es fundamental para su desarrollo integral.

A pesar de los esfuerzos realizados en los últimos años para abrir más cupos en los colegios del país y brindar educación a la población migrante, aún persisten grandes barreras para el 16% de niños venezolanos desescolarizados.

Es necesario seguir trabajando en conjunto con organizaciones internacionales y autoridades locales para superar los desafíos que impiden el acceso equitativo a la educación de estos niños y garantizarles un futuro más prometedor.

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