EL VENEZOLANO COLOMBIA
El Tapón del Darién en la selva colombiana y panameña se ha convertido recientemente en una zona en la que venezolanos han perdido la vida en su intento por cruzar la frontera y llegar a Estados Unidos.
Sin embargo, esta no es la única zona del continente donde los migrantes venezolanos han perdido la vida intentando transitarla. Lo propio también ha ocurrido en Chile, con aquellas personas que se han aventurado a intentar cruzar el desierto de Atacama. Se trata de un territorio inhóspito que cubre una superficie aproximada de 105.000 kilómetros cuadrados, para poder ingresar al país.
Se calcula que en los últimos años al menos una decena de venezolanos han muerto en esta zona, donde las temperaturas pueden llegar a elevarse durante el día hasta los 50 °C, mientras que en la noche pueden descender hasta los -25 °C. Por este motivo esta zona es considerada como “el lugar no polar más árido de la Tierra”.
Además, durante ciertas temporadas del año pueden llegar a registrarse ventiscas con velocidades que pueden superar los 100 kilómetros por hora.
Peligros en el desierto de Atacama
Al igual que en otras partes del continente, los venezolanos en esta zona se encuentran a merced de coyotes que prometen ayudarlos a cruzar la frontera que separa Perú y Chile. No obstante, en muchas ocasiones, estas promesas terminan por ser falsas, ya que son abandonados durante el trayecto.
A esta situación se suma el hecho de que algunos venezolanos prefieren no pedir auxilio en los pocos puntos repartidos a lo largo del desierto con presencia de Carabineros (policías), por el temor a que puedan llegar a ser deportados de regreso a Venezuela.
Pese a esto las autoridades han intervenido en varios casos para rescatar migrantes que, o bien se encontraban perdidos por haber sido abandonados, o bien ya no contaban con fuerzas y suministros para poder continuar su travesía.
Por si esto fuera poco, los migrantes venezolanos también tienen que enfrentarse a zonas, sin ningún tipo de demarcación que se encuentran minadas desde hace años. Esto debido a que durante la dictadura de Augusto Pinochet, ciertas zonas fueron minadas ante la posibilidad de que se desatará un conflicto armado con Perú.
Para el año 2008 se estimaba que en todo el desierto había cerca de 105.000 minas antipersonas y 52.000 minas antitanques que pueden explotar ante el contacto más leve. Asimismo, se calcula que en los últimos 44 años unas 100 personas han fallecido o han resultado gravemente heridas como consecuencia de estos explosivos.
Comunidad venezolana en Chile
La migración venezolana a Chile ha sido tal durante los últimos años que actualmente representan la comunidad extranjera más grande de todo el país. Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) de ese país los migrantes venezolanos representaban para el año 2020 poco más del 30 % de los extranjeros en territorio chileno.
De esta manera dejaron atrás a otras representaciones como la peruana (16,3 %), que históricamente habían sido las más numerosas en el país.
Se trata además, de la tercera comunidad de venezolanos expatriados más grande del mundo con más de 460.000 personas, cifra que según algunos sondeos más recientes se cree que podría superar ya las 500.000 personas.
De acuerdo con el informe “Balance de Movilidad Humana 2018-2022” elaborado por el Servicio Jesuita Migrante (SJM), más de 5.000 menores de edad venezolanos ingresaron a Chile de manera irregular durante el último año.