
EL VENEZOLANO COLOMBIA
Nicolás Maza ha logrado lo que para muchos parecería imposible: visitar cada país del mundo. El médico cardiólogo, oriundo de Maturín, alcanzó una meta que muy pocos seres humanos han logrado.
Con 197 naciones recorridas, incluyendo las 193 reconocidas por la Organización de las Naciones Unidas, Maza inscribe su nombre en la historia como el primer venezolano en completar esta proeza.
Una curiosidad que se transformó en propósito
Desde sus años de juventud, Nicolás sintió una fascinación por descubrir territorios lejanos. Su espíritu inquieto y el deseo de conocer otras formas de vida lo llevaron a iniciar, a los 19 años, un camino que se extendería por décadas.
Su primer viaje al extranjero fue a Estados Unidos, punto de partida de una aventura que lo llevó a explorar desde metrópolis vibrantes hasta rincones remotos.
Más allá del turismo: un viaje transformador
Su travesía no fue simplemente una colección de destinos. A través de sus exploraciones, Maza documentó tradiciones, rostros, costumbres y paisajes. Su visión se enriqueció al experimentar directamente las realidades de culturas diversas, aportándole no solo una mirada global, sino también una comprensión más profunda de lo que une a la humanidad.
El cardiólogo no se limitó a observar: también compartió. Mediante plataformas digitales y redes sociales, difundió relatos, imágenes y reflexiones que inspiraron a miles de personas, dentro y fuera de Venezuela, a soñar con horizontes amplios y posibles.
Una proeza con pocas comparaciones
“Más individuos han estado en el espacio que los que han pisado todos los países del planeta”, declaró Maza. Y no es una exageración. Su logro representa una hazaña que combina preparación, persistencia y pasión. En cada sello de su pasaporte hay una historia, un encuentro, una lección.
Su gesta no solo destaca por su dimensión física, sino por el aprendizaje cultural y humano que adquirió a lo largo del camino. En su testimonio, se advierte una admiración sincera por la riqueza del mundo y una mirada agradecida por cada experiencia vivida.
Orgullo nacional y ejemplo de perseverancia
El nombre de Nicolás Maza ya figura entre los grandes viajeros del siglo XXI. Como médico, llevó consigo no solo una formación científica, sino también una ética de servicio que se reflejó en el respeto con el que abordó cada lugar visitado.
Su historia resuena especialmente en tiempos donde las fronteras, los conflictos y las migraciones ocupan el centro del debate global. Maza demuestra que es posible conectar al planeta desde la empatía y el conocimiento.