EL VENEZOLANO COLOMBIA
Una década de cambios y desafíos ha transformado la fisonomía de Venezuela. En este tiempo, se ha experimentado una disminución económica drástica, una migración masiva y una constante reconfiguración del panorama social.
Al examinar estos diez años, se perciben aspectos que se han modificado sustancialmente y otros que, a pesar del tiempo, permanecen inalterables.
Persistencia y nostalgia
A lo largo de este período, persiste una nostalgia palpable entre los venezolanos, recordando tiempos pasados de opulencia y bienestar.
La sensación de pérdida se entrelaza con la distancia entre quienes se han ido y quienes permanecen, evidenciando la añoranza por un país que ha cambiado drásticamente.
Escenarios invariables
Algunos aspectos cotidianos no han cambiado: las noches cálidas aún comienzan con el sonido de las ranitas en la capital.
La vida urbana sigue siendo entretenida, con vendedores ambulantes, juegos de dominó en plazas y la sensación de vivir en una realidad inverosímil.
Adaptación creativa y emprendimiento
A pesar de las dificultades, los venezolanos han demostrado una notable capacidad de adaptación y emprendimiento.
La dolarización ha fomentado trabajos informales en dólares, impulsando negocios artesanales, reparaciones, ventas ambulantes y apuestas digitales.
Perspectiva en la adversidad
La resiliencia y adaptabilidad del pueblo venezolano se reflejan en la normalización de situaciones inusuales.
A pesar de la crisis persistente, la población se ha adaptado, mostrando humor y creatividad para enfrentar los desafíos cotidianos.
Cambios temporales y persistencias culturales
A pesar de algunos cambios temporales, como la disminución de la sensación de inseguridad, aspectos arraigados en la cultura y la identidad venezolana siguen presentes.
La adaptación lingüística y expresiones culturales malandras se han convertido en parte de la identidad venezolana.
La Venezuela de la última década ha enfrentado cambios significativos y, a su vez, ha preservado aspectos arraigados en su identidad cultural. Ante esta realidad compleja, es crucial promover medidas que resalten la creatividad emprendedora del pueblo venezolano y que mitiguen las dificultades persistentes, fomentando vías para mejorar la calidad de vida y preservar la riqueza cultural única de este país.