EL VENEZOLANO COLOMBIA
Un reciente estudio realizado por la Universidad Manuela Beltrán en Bogotá ha arrojado resultados preocupantes. Según el informe, el 60% de las mujeres en la ciudad evitan usar minifaldas debido al temor a ser víctimas de acoso.
Además, el transporte público y la vía pública son los espacios donde más evitan esta prenda. El estudio también destaca que el color de la falda y las etiquetas sociales juegan un papel importante en la decisión de usarla o no, y que las mujeres mayores de 30 años son las que más han dejado de usar faldas.
Temor al acoso y exposición
El estudio de la Universidad Manuela Beltrán reveló que muchas mujeres en Bogotá se sienten expuestas y temen ser objeto de acoso si usan faldas, especialmente en sitios de rumba y en espacios públicos como calles y transporte público.
La atención no deseada y la percepción de estar desubicadas son factores que influyen en esta decisión.
El color de la prenda y las etiquetas sociales
La psicóloga forense Paula Andrea Maya explicó que el color de la falda también es un factor determinante en la decisión de las mujeres.
Algunos estampados o colores podrían estigmatizarlas y generar señalamientos de índole sexual u otros conceptos negativos. Esto refuerza el temor y la inseguridad al usar faldas.
Testimonios inquietantes
Los testimonios recogidos durante la investigación muestran el impacto del acoso en la vida de las mujeres. Muchas de ellas se sienten incómodas e inseguras en espacios públicos, donde pueden ser objeto de comentarios sucios y miradas lascivas.
El transporte público, en particular, es señalado como uno de los lugares donde ocurre con mayor frecuencia el acoso.
Evitar faldas como alerta sobre violencia de género
La evitación del uso de faldas por parte de las mujeres en Bogotá es un claro signo de alerta sobre la violencia de género en la ciudad.
Las autoridades han tomado medidas para capturar a los acosadores en el transporte público, pero aún persiste el temor entre las mujeres.
Esta situación resalta la necesidad de mayor acompañamiento y protección por parte de las autoridades en torno a este tema.
El estudio de la Universidad Manuela Beltrán ha revelado que muchas mujeres en Bogotá evitan usar faldas debido al temor a ser víctimas de acoso. La inseguridad y la exposición en espacios públicos como el transporte y las calles son las principales razones detrás de esta decisión.
Además, el color de la prenda y las etiquetas sociales también influyen en la percepción de seguridad al usar faldas. Estos resultados resaltan la necesidad de abordar la violencia de género en la ciudad y garantizar la protección y bienestar de las mujeres en sus desplazamientos diarios.