EL VENEZOLANO COLOMBIA | POR: SIMÓN GAMBOA GARCÍA
La jornada del 01 de Mayo comenzó muy temprano en varios puntos de la capital colombiana donde se dieron cita centrales obreras, partidos políticos, gremios y ciudadanos que se iban a congregar para conmemorar el Día Internacional del Trabajador en Bogotá.
Por toda la ciudad se vieron marchas que arengaron consignas sobre la lucha laboral, algunas apoyando las reformas laborales propuestas por el gobierno de Gustavo Petro y en rechazo firme.
Sobre las 10:00am coinciden todas estas marchas en la Plaza de Bolívar en el centro de Bogotá, donde la multitud se concentra como en años anteriores para expresar su voz.
Pero este año es diferente: ya que no había tribuna para los trabajadores ni centrales obreras, la dinámica era que gremios, centrales obreras y personajes puntuales asistieran a la Plaza de Armas frente al Palacio de Nariño donde en un estricto filtro policial ingresan al rededor del 50% de los asistentes, los otros quedan rezagados en la plaza de Bolívar.
Pasadas las 10:00am comienza el evento que fue pautado y es que en el balcón del palacio de Nariño, el presidente Petro convoca a estos grupos que aunque colman la plaza de armas no fue una gran multitud como en años anteriores.
El presidente Petro al lado de su esposa comienza su intervención con gran oratoria como lo caracteriza pero también con la retórica con la que envuelve y comienza recordando luchas independentistas libertadora remontándose a la época de Bolívar y la liberación del yugo español, asemejándola a la gestión del Gobierno nacional en 8 meses de mandato, donde compara sacrificios del ejército liberador con la lucha que hoy se está dando y que la reformas que es la banderas de lucha del presidente en especial la laboral amerita sacrificio y decisiones duras.
Así el público atento escucha cómo se explica que lo que haya que hacer es necesario y que hacen muchas faltas por hacer para que las reformas se den, porque es un designio de la lucha de los desfavorecidos y el mandato del pueblo.
En esa intervención hace alusión a la razón por la cual existe este día y explica con gran detalle la lucha que se dio en Estados Unidos por parte de trabajadores migrantes, irlandeses, italianos entre otros para la reducción de horas laborales y derecho al descanso. Un punto que rescatar y resaltar de esta intervención y asemejarlo a lo que hoy se vive con la población migrante que busca empleo y trabaja en Colombia.
Así transcurre más de una hora, tomando parte de las notas históricas para hacer entender su punto, y es que las reformas es para el pueblo, que lo que la lucha que se está dando es una revolución pero que si no se dan las reformas también podría generar una revolución, pero que él como hombre inteligente ya ha analizado y la lucha amerita más esfuerzo y los sacrificios que sean necesarios, pasando por trabajar doble turno y si es necesario otro periodo presidencial pues no lo dudaría, lo que sea necesario por esta lucha.
Así concluye su intervención ante la presencia de centrales obreras y gremios que querían expresar tanto su apoyo como su descontento pero que su presencia ahí fue solo de espectadores ante el monólogo ya predecible y con el carácter que últimamente está caracterizando al gobierno nacional.
Así después de más de una hora concluye la intervención ingresando a su palacio “frío y grande como él lo llama” para esperar que su llamado a acompañar esta lucha por la mayoría haya calado y estimulado a las masas.
Terminando la intervención los asistentes dejan la plaza con arengas y un sin sabor por no ser ellos los protagonistas, siendo hoy el día del trabajador, cosa que de muy seguro va a dar de hablar en los medios de comunicación en todas sus formas sobre las opiniones que hoy quedaron en el imaginario del pueblo.