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Unos 54 activistas de todo el país vinculados a la Unión Patriótica de Cuba (Unpacu) se encuentran desde hace seis días en huelga de hambre para protestar por el incremento de la represión. A ellos se sumaron en las últimas horas, cinco cubanos residentes en Estados Unidos, Suiza y Colombia.
Con el ayuno, los miembros de la Unpacu denuncian las amenazas de que han sido víctimas, por parte de oficiales del Ministerio del Interior, las personas que asistían al comedor ubicado en la sede de la organización opositora, en la ciudad de Santiago de Cuba.
En el local se alimentaban más de 200 residentes de la zona en situación de pobreza extrema, según divulgó la organización en un comunicado de prensa. «También se comparten medicinas y se ofrece asistencia médica».
En el local se alimentaban más de 200 residentes de la zona en situación de pobreza extrema
En los últimos días, los agentes de la Seguridad del Estado llegaron «a golpear e incluso a arrestar de manera arbitraria a varios niños que iban a buscar comida», denunció el grupo.
Los huelguistas comunicaron que demandan libertad para realizar su labor humanitaria y exigen «el cese de los maltratos y los abusos graves a los derechos humanos de mujeres, ancianos y ciudadanos en general». Además manifestaron que «Raúl Castro y Miguel Díaz-Canel, al mando del Estado en Cuba», son responsables de la integridad física de los activistas.
«Exhortamos a todos los gobiernos e instituciones democráticas de las Américas y Europa a tomar acción para detener la impunidad del régimen cubano y exigir el fin de la represión política»
José Daniel Ferrer, líder de la organización y uno de los activistas en huelga de hambre, dijo este jueves que «se cumplen 11 días del cerco de las fuerzas represivas de la tiranía contra nuestra sede principal».
Junto a Ferrer, iniciaron la huelga el pasado sábado, su esposa Nelva Ortega, Evert L. Hidalgo, Ebert Hidalgo Cruz, Abel Peña, Wilfredo Carrazana, Jorge de la Torre, Yailín Pérez, José Bell y Justin Bell. Ese día el exprisionero político denunció que a sus compañeros les habían cortado los servicios de internet y telefonía móvil.
Según declaró Ferrer este jueves a Radio Televisión Martí, los huelguistas ya presentan «síntomas de cansancio, náuseas, dolores de cabeza, en las articulaciones, estomacales». Los que se unieron recientemente «están todavía muy fuertes», considera el disidente.
Los huelguistas ya presentan «síntomas de cansancio, náuseas, dolores de cabeza, en las articulaciones, estomacales»
El opositor cuenta con el apoyo de organizaciones civiles y políticas dentro y fuera de la Isla como Cuba Decide, el Partido Republicano de Cuba, el Frente Antitotalitario Unido, el Partido por la Democracia Pedro Luis Boitel y la Fundación para la Democracia Panamericana. El Secretario General de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, expresó su solidaridad con los huelguistas.
«Exigimos al régimen de #Cuba el fin de la represión y violencia contra los activistas, niños, mujeres y las personas en situación de pobreza extrema que buscan alimentos en la isla», escribió Almagro en Twitter.
Desde hace más de un mes, Ferrer ha denunciado el asedio de la Seguridad del Estado a la sede de la organización opositora. A finales de febrero fue asaltada por varios agentes que derribaron una de las rejas y allanaron el sitio.
El Partido del Pueblo, que preside Ferrer, también condenó el hecho y atribuyó el asalto a la labor que desarrolla a diario Unpacu. Ello incluye, hizo hincapié, un comedor social y un consultorio médico, donde ofrecen «comida y medicamentos gratuitos a niños y ancianos».