EL VENEZOLANO COLOMBIA
El cierre sorpresivo del terminal de pasajeros de Cúcuta, por parte de los conductores de la empresa de transporte público Catatumbo, generó tensiones y conflictos en la ciudad fronteriza. La decisión de trancar el acceso a todos los vehículos por puesto venezolanos afectó a las líneas de transporte Quinta República, Expresos Bolivarianos y Fronteras Unidas de Venezuela, impidiendo que pudieran dejar y recoger pasajeros en la terminal.
Esta medida repercutió directamente en los usuarios que buscaban continuar su trayecto desde Cúcuta a San Cristóbal, Venezuela. Los viajeros manifestaron sus preocupaciones y preferencias por el transporte venezolano debido a su costo más asequible. La situación generó acuerdos y controversias, destacando la necesidad de una solución que garantice igualdad de condiciones entre las empresas de ambos países.
El cierre y sus consecuencias
La empresa de transporte público Catatumbo tomó la drástica decisión de bloquear el terminal de pasajeros de Cúcuta a todos los vehículos por puesto venezolanos.
Esta acción afectó directamente a las empresas Quinta República, Expresos Bolivarianos y Fronteras Unidas de Venezuela, impidiéndoles realizar sus operaciones normales y afectando a los usuarios que buscaban continuar su viaje hacia San Cristóbal, Venezuela.
Los pasajeros expresaron sus preferencias por el transporte venezolano debido a su precio más accesible y la mejora en las condiciones de viaje.
La visión de los conductores venezolanos
Jorge Romero, representante de los conductores venezolanos, aclaró que la medida de cierre del terminal se debía a que la empresa Catatumbo argumentó que los conductores venezolanos no tenían habilitación para traer pasajeros de Venezuela a Cúcuta.
Los conductores expresaron que están brindando un servicio más económico y cómodo para los viajeros, evitando transbordos en el terminal de San Antonio. Aseguraron que la mayoría de los trabajadores de estas líneas son colombianos, desmintiendo la alegación de discriminación laboral.
Respuestas de las autoridades y empresas
El gerente de la central de transporte de Cúcuta, Andrés Posada, explicó que el cierre del terminal no tenía una razón justificable, ya que la empresa Catatumbo no contaba con la habilitación del Ministerio de Transporte de Venezuela para transportar pasajeros desde ese país.
Por su parte, Juan Carlos Rangel, director operativo de Catatumbo, argumentó que la entrada de vehículos de transporte venezolanos no fue socializada con el gremio de transporte colombiano del terminal. Solicitaron igualdad en las condiciones de trabajo y tarifas para ambos países.
Acuerdo provisional
Luego de horas de tensión y discusión, las partes involucradas lograron llegar a un acuerdo provisional. Se habilitaron un vehículo venezolano y uno colombiano para garantizar el trabajo de ambas empresas. Sin embargo, se espera que la próxima semana el terminal de San Antonio permita la carga de pasajeros en carros colombianos para lograr una mayor igualdad de condiciones para ambas empresas de transporte.
El cierre abrupto del terminal de Cúcuta por parte de conductores de la empresa Catatumbo generó problemas para los usuarios venezolanos que deseaban viajar a San Cristóbal. La situación reveló tensiones y demandas de igualdad entre las empresas de transporte de ambos países. A pesar de alcanzar un acuerdo provisional, la incertidumbre persiste hasta que se resuelvan las condiciones de trabajo y tarifas para ambas partes.
La situación destaca la importancia de encontrar soluciones que beneficien tanto a los usuarios como a las empresas involucradas en el transporte fronterizo.