EL VENEZOLANO COLOMBIA
La administración del presidente estadounidense Donald Trump confirmó que no renovará la licencia que permitía a la petrolera Chevron mantener operaciones activas en territorio venezolano, como parte de una nueva estrategia de presión contra el gobierno de Nicolás Maduro.
Este martes se informó oficialmente desde Washington que la autorización vigente expirará a las 23:59 horas de la costa este de Estados Unidos, es decir, a las 03:59 GMT del miércoles. La decisión marca un punto de quiebre en la política energética hacia Venezuela y afecta directamente al principal actor estadounidense aún presente en el sector petrolero local.
Presión directa contra Caracas
La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, fue la encargada de anunciar la medida. En declaraciones a medios internacionales, señaló que el objetivo es evitar que “fluya dinero hacia el régimen de Maduro”. Además, reveló que Trump dio instrucciones al secretario de Estado, Marco Rubio, para dejar sin efecto todas las licencias otorgadas durante la gestión de Joe Biden.
Bruce argumentó que los permisos anteriores “beneficiaron directamente al gobierno venezolano”, por lo que, a partir de esta semana, Chevron solo podrá efectuar tareas de mantenimiento básico. Quedan suspendidas las actividades de perforación, extracción y exportación de petróleo.
Una licencia ligada al diálogo político
Las licencias a Chevron fueron otorgadas en noviembre de 2022 durante el gobierno de Joe Biden, en el contexto de las negociaciones entre el chavismo y la oposición venezolana, con miras a acordar condiciones para elecciones presidenciales. La compañía estadounidense había jugado un rol estratégico en la recuperación gradual de la industria petrolera venezolana, profundamente afectada por años de sanciones e inestabilidad.
Aunque Trump anunció desde marzo que cancelaría el permiso el 3 de abril, luego se concedió una prórroga temporal hasta el 27 de mayo. Esta extensión generó expectativas de una posible renovación.
Cruce de versiones dentro del propio equipo de Trump
En días recientes, el enviado especial de Trump, Richard Grenell, había insinuado que se mantendría la autorización tras una negociación con Caracas para liberar a un ciudadano estadounidense retenido en Venezuela. No obstante, estas afirmaciones fueron desmentidas por Marco Rubio, quien reafirmó que el plazo finalizaría sin nueva prórroga.
La divergencia interna reflejó tensiones dentro del equipo de política exterior republicano, pero finalmente se impuso la postura de cierre total de la licencia.
Consecuencias para la economía venezolana
La salida operativa de Chevron representa un revés económico considerable para Venezuela, pues la compañía estadounidense había contribuido significativamente al incremento reciente en la producción de crudo. Su participación fue clave para mantener en marcha asociaciones mixtas con la estatal PDVSA, y su retirada limitará el ingreso de divisas y la capacidad técnica del país en el corto plazo.
El nuevo escenario reafirma la postura de máxima presión que Trump ha adoptado frente al gobierno de Maduro, cerrando cualquier margen de colaboración energética hasta nuevo aviso.
