EL VENEZOLANO COLOMBIA
Un reciente informe de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) destaca la significativa contribución económica de los migrantes venezolanos en Perú. Según el estudio, esta población aportará 530 millones de dólares en impuestos durante 2024, una cifra que podría alcanzar los 797 millones anuales si todos los venezolanos fueran regularizados. Este análisis pone en evidencia el impacto positivo de la integración laboral y social de los migrantes en sus países de acogida.
Un aporte fiscal en constante crecimiento
El estudio, titulado «Análisis exploratorio de la contribución fiscal y económica de la migración venezolana en Perú», revela que los venezolanos generarán el 1,35 % de los ingresos tributarios del país este año.
Estas proyecciones reflejan la importancia de la diáspora como un motor económico en sectores clave, impulsando la recaudación fiscal y contribuyendo al presupuesto nacional.
El gasto que dinamiza la economía peruana
Otro hallazgo significativo es que el 96,1 % de los gastos de los migrantes venezolanos permanece en Perú, lo que significa que esta población contribuye directamente al comercio local, al consumo interno y a la generación de empleos indirectos. Solo un 3,9 % de sus ingresos es enviado al exterior como remesas, lo que refuerza su rol como actores clave en la economía peruana.
La regularización como oportunidad de progreso
El informe subraya que, si los venezolanos obtuvieran una situación migratoria regular y accedieran al mercado laboral formal, su contribución fiscal podría incrementarse notablemente hasta alcanzar los 797 millones de dólares anuales. Este aumento representaría un 2 % de los ingresos tributarios totales del país, consolidando su impacto como un factor de desarrollo económico sostenible.
Una perspectiva de integración económica y social
Diego Beltrand, Enviado Especial de la OIM para la Respuesta Regional a los flujos migratorios, resaltó que este estudio ofrece pruebas contundentes del potencial transformador de la migración. “Se puede estimular el progreso económico y social en las naciones de acogida si se promueven políticas inclusivas y de regularización,” afirmó Beltrand en un comunicado oficial.
El desafío de aprovechar este potencial
Si bien las cifras son prometedoras, el reto radica en implementar estrategias que permitan la integración de los migrantes en el ámbito formal. Esto no solo beneficiará a los propios venezolanos al mejorar sus condiciones de vida, sino que también reforzará el tejido económico y social de Perú, creando un escenario de beneficio mutuo para ambas partes.
El informe de la OIM pone de manifiesto el impacto positivo que la migración puede tener en el desarrollo económico de los países receptores. La integración laboral y regularización de los venezolanos en Perú no solo aumentará la recaudación fiscal, sino que también fortalecerá la cohesión social y económica. En este contexto, aprovechar el potencial de esta población se convierte en una oportunidad estratégica para el futuro del país.