EL VENEZOLANO COLOMBIA
Durante octubre, un promedio de 3.000 venezolanos cruzó diariamente la frontera hacia Colombia, marcando un incremento en la salida de personas que buscan nuevas oportunidades fuera de su país. Así lo reportó William Gómez, experto en temas fronterizos, quien detalla cómo el flujo migratorio refleja las dificultades que enfrenta la población venezolana en su territorio.
Flujos migratorios: con y sin documentación
De los 3.000 ciudadanos que cruzaron la frontera a diario, aproximadamente 1.200 lo hicieron con sello migratorio, cumpliendo los requisitos de salida de ambos países. Sin embargo, un significativo número de personas, alrededor de 1.800, empleó su cédula o pasaporte vencido y cruzó sin sello, una práctica que ha sido tolerada en la frontera colombo-venezolana debido a la situación particular de muchos migrantes venezolanos.
Esto evidencia el gran número de personas que, a pesar de no contar con documentación actualizada, se ven obligadas a abandonar el país en busca de mejores condiciones de vida, indicó el diario La Nación web.
Principales puntos de cruce
Según Gómez, la salida más alta de migrantes se registró a través del eje San Antonio-Ureña, que conecta el estado Táchira, en Venezuela, con el departamento Norte de Santander, en Colombia. Este eje ha sido uno de los más transitados desde que comenzaron las grandes oleadas migratorias en años recientes, convirtiéndose en el paso preferido de quienes huyen de la crisis venezolana.
Los cuatro puentes que unen Táchira con Norte de Santander han jugado un papel crucial, facilitando el tránsito de personas en medio de estrictos controles y limitaciones logísticas.
Motivos de la salida masiva
La crisis económica y social en Venezuela es uno de los principales factores que ha impulsado esta migración hacia Colombia, con muchos ciudadanos buscando empleo, acceso a servicios básicos y mejores condiciones de vida.
La falta de alimentos, medicinas y servicios públicos esenciales continúa empujando a los venezolanos a emprender largos recorridos, incluso sin contar con todos los requisitos legales para migrar. Colombia ha sido un país receptor de gran parte de esta migración, que ha supuesto retos importantes para las autoridades y comunidades de acogida en las zonas fronterizas.
Desafíos y oportunidades para los migrantes
La alta movilidad de venezolanos hacia Colombia plantea retos significativos para los gobiernos de ambos países, que deben coordinar esfuerzos para asegurar una migración ordenada y segura. Al mismo tiempo, para los migrantes, el cruce hacia Colombia representa la posibilidad de reconstruir sus vidas y acceder a nuevas oportunidades laborales y sociales.
Organizaciones de ayuda humanitaria y ONGs han establecido en la frontera puntos de apoyo para orientar y asistir a aquellos que, a menudo, llegan con necesidades urgentes.
Un fenómeno en aumento
Este flujo constante de venezolanos cruzando hacia Colombia muestra una tendencia que, según expertos, podría seguir aumentando en los próximos meses. La frontera colombo-venezolana se mantiene como una de las principales vías de escape para miles de personas, en un contexto donde la situación interna de Venezuela continúa deteriorándose.
La migración venezolana sigue siendo un fenómeno complejo que requiere una respuesta coordinada entre ambas naciones, con el fin de garantizar la seguridad y el bienestar tanto de los migrantes como de las comunidades receptoras.