EL VENEZOLANO COLOMBIA
El régimen de Nicolás Maduro ha introducido cambios significativos en las restricciones de ingreso al país para los venezolanos con pasaportes vencidos. A partir de este miércoles 2 de octubre, algunos ciudadanos podrán regresar a Venezuela sin la necesidad de solicitar un salvoconducto que se anunció esta semana.
Sin embargo, estas excepciones no aplican para todos, y ciertos grupos de venezolanos aún deben cumplir con este trámite para abordar un vuelo hacia su país.
Excepciones a la norma: quiénes no necesitan salvoconducto
En un comunicado emitido por el Consejo Superior de Turismo (Conseturismo), el gobierno venezolano anunció que ciertos ciudadanos con pasaporte vencido estarán exentos de solicitar un salvoconducto para ingresar al país.
Entre los beneficiados se encuentran los venezolanos con doble nacionalidad y aquellos que poseen residencia legal en el extranjero. Esta medida alivia la presión sobre un grupo de ciudadanos que, debido a las dificultades económicas y logísticas, han tenido complicaciones para renovar sus pasaportes, cuyo costo es considerado uno de los más altos del mundo.
La decisión de flexibilizar este requisito responde a las críticas de numerosos venezolanos que se habían visto obligados a realizar costosos trámites adicionales para regresar a su país. Aun así, la necesidad de un pasaporte vigente para salir de Venezuela se mantiene sin cambios.
Grupos que aún deben solicitar salvoconducto
A pesar de las nuevas excepciones, no todos los venezolanos con pasaporte vencido están exentos de este trámite. Aquellos que no poseen residencia legal en otro país aún deben solicitar el salvoconducto para abordar vuelos hacia Venezuela.
Esto incluye a los venezolanos residentes en países miembros del Mercosur, a pesar de que en algunos casos, el acuerdo permite viajar únicamente con la cédula de identidad para vuelos directos desde Bolivia, el único país con vuelos directos a Venezuela bajo este convenio.
El gobierno ha puesto a disposición un correo electrónico oficial para consultas sobre el salvoconducto, con el objetivo de resolver casos particulares y dudas que puedan surgir sobre el proceso.
Problemas para la renovación de pasaportes
Uno de los principales problemas que enfrentan los venezolanos es el alto costo y la burocracia para renovar el pasaporte. Con un precio que ronda los 200 dólares en Venezuela y que puede superar los 300 dólares en el extranjero, muchos ciudadanos han optado por viajar con pasaportes vencidos o han recurrido al salvoconducto para regresar al país. Esta situación ha generado una demanda creciente de trámites, complicando la movilidad de los venezolanos en el exterior.
Además, los cierres de consulados en países como Estados Unidos, Chile, Perú y Costa Rica, han dejado a numerosos venezolanos sin acceso a servicios consulares esenciales, como la legalización de documentos y la renovación de pasaportes. En muchos casos, los ciudadanos venezolanos en estos países dependen completamente del salvoconducto para poder regresar a su nación de origen.
Salvoconducto digital: una nueva opción
El gobierno de Venezuela también ha anunciado que habilitará un servicio digital para tramitar el salvoconducto a través del Ministerio de Relaciones Exteriores a partir del 14 de octubre. Este servicio estará disponible para los venezolanos que residen en países sin representación consular, lo que incluye a aquellos en Argentina, Uruguay, Chile y Estados Unidos, entre otros.
El cierre de consulados en varios países ha dejado a miles de venezolanos sin protección consular y sin acceso a los trámites que normalmente se realizaban a través de estas oficinas. La creación del salvoconducto digital busca ofrecer una solución parcial a esta problemática, aunque muchos especialistas señalan que el requerimiento de este documento viola artículos de la Constitución venezolana relacionados con la libre movilidad y el derecho al retorno.
La flexibilización de las normas sobre el uso de salvoconducto para ingresar a Venezuela ha traído alivio a algunos ciudadanos con pasaportes vencidos, pero no soluciona por completo los problemas que enfrentan muchos otros venezolanos en el extranjero. Las restricciones de salida, la falta de servicios consulares y los costos elevados siguen siendo barreras que limitan la movilidad de una gran parte de la diáspora venezolana.