El posible cierre del Darién: Impacto y consecuencias

◉ Juanita Goebertus, directora para las Américas de HRW se refirió al anuncio del Gobierno de Panamá de cerrar al menos tres pasos utilizados por los migrantes para cruzar el Darién

EL VENEZOLANO COLOMBIA

El Gobierno de Panamá ha anunciado medidas para controlar la masiva migración irregular a través de la selva del Darién, un corredor crítico para los migrantes que se dirigen hacia Norteamérica. La decisión de bloquear tres pasos no autorizados, incluidos los pasos por las costas del Pacífico y el Caribe, así como el sector terrestre del Hito de Chucurti, ha generado preocupación en diversas organizaciones de derechos humanos y expertos en migración. Analizamos las posibles consecuencias de este cierre y su impacto en la región.

Medidas del Gobierno Panameño

El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) ha implementado barreras perimetrales para bloquear tres pasos no autorizados en la selva del Darién. Estos incluyen accesos por la costa Pacífica, la costa Caribe y el sector terrestre del Hito de Chucurti, conocido por ser una ruta clave utilizada por migrantes irregulares. Estas medidas buscan frenar el flujo migratorio masivo que ha superado los 195,000 migrantes en lo que va del año, la mayoría de ellos venezolanos.

Según la Defensoría del Pueblo, más de 520,000 personas cruzaron el Darién en 2023. Esta migración masiva ha llevado al gobierno panameño a tomar medidas drásticas para controlar la situación. Sin embargo, la efectividad y las repercusiones de estas acciones están en debate, especialmente en cuanto al respeto y protección de los derechos humanos de los migrantes.

Preocupaciones de Derechos Humanos

Diversas organizaciones de derechos humanos han expresado su preocupación por las implicaciones de estas medidas. Juanita Goebertus, directora para las Américas de Human Rights Watch (HRW), subraya que es crucial asegurar que los derechos de los migrantes sean respetados y protegidos. Goebertus advierte que la complejidad geográfica del Darién hace difícil un cierre efectivo y que, incluso si se lograra, la falta de control estatal tanto en Panamá como en Colombia sigue siendo un problema significativo.

Control por Grupos Criminales

Las rutas migratorias a través del Darién están controladas en gran medida por el Clan del Golfo, un grupo criminal que obtiene grandes beneficios económicos del tráfico de personas. Según Goebertus, el Clan del Golfo recibe aproximadamente 68 millones de dólares al año por controlar estas rutas. La ausencia de un control estatal efectivo en ambas naciones permite que estos grupos sigan operando con impunidad.

Consecuencias del Cierre

Goebertus advierte que las malas políticas migratorias no reducen la migración, sino que la desvían hacia rutas aún más peligrosas. El cierre de pasos no autorizados sin un aumento en la capacidad de control real probablemente no detendrá el flujo migratorio. En cambio, los migrantes, principalmente venezolanos, ecuatorianos y haitianos que huyen de persecución política y situaciones de inseguridad, buscarán otras vías irregulares.

Obligaciones Internacionales

Panamá tiene obligaciones internacionales de verificar los casos de migrantes y establecer si tienen derecho a la protección internacional. Las medidas restrictivas pueden violar estos derechos, poniendo en riesgo a personas que podrían ser elegibles para asilo o refugio.

Contexto internacional

La migración masiva a través del Darién no solo es resultado de la crisis en Venezuela y la inseguridad en Ecuador, sino también de políticas migratorias en otros países. La imposición de visados a venezolanos en México y Guatemala ha obligado a muchos a tomar rutas peligrosas a través del Darién. La combinación de factores internos y externos crea un escenario complejo y desafiante para la gestión de la migración en la región.

El cierre del Darién por parte del gobierno panameño, aunque bien intencionado, presenta numerosas dificultades y potenciales consecuencias negativas. Las medidas podrían desviar a los migrantes hacia rutas más peligrosas y aumentar el control de grupos criminales sobre estas rutas. Además, es fundamental que Panamá cumpla con sus obligaciones internacionales para proteger los derechos de los migrantes. Enfrentar esta crisis requiere una cooperación regional y una estrategia integral que aborde tanto las causas como los efectos de la migración masiva.

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