EL VENEZOLANO COLOMBIA | OIM
En 18 departamentos de Colombia, 724 personas pertenecientes a 31 Redes Comunitarias de Salud (RCS), llevaron a cabo, en cada uno de sus territorios, una sesión de cuidado y bienestar psicosocial con el objetivo de reconocer y reflexionar sobre el rol que ellos desarrollan en el apoyo de la gestión para la promoción y protección de la salud en sus comunidades.
Esta acción se hizo en el marco de la estrategia ‘Actívate por la Salud Mental y el Bienestar Psicosocial’, una iniciativa que busca fortalecer las habilidades y capacidades de los líderes y lideresas de las RCS, en la comprensión y abordaje de la salud mental de base comunitaria en contextos migratorios, gracias al respaldo financiero de la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los Estados Unidos (PRM), e implementada por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Las RCS son integradas por líderes y lideresas nacionales venezolanos y colombianos que realizan desde 2019 acciones voluntarias para promover la salud y el bienestar de las poblaciones de refugiadas y migrantes, y de comunidades de acogida en 18 departamentos de Colombia, en articulación con la institucionalidad local y otros aliados clave.
Durante la sesión, con el apoyo de la OIM, los integrantes de las RCS reflexionaron sobre los hitos claves de su proceso de conformación, fortalecimiento y funcionamiento, destacando los logros, desafíos y retos para este año 2024. También, recibieron por parte de los equipos territoriales de la Organización un diploma de reconocimiento por la labor que vienen realizando.
“Yo estoy desde que inició la red comunitaria, desde que era un semillero. Ha sido un antes y un después, nos vemos empoderados y mucho más apasionados por el trabajo comunitario. Este reconocimiento me llena el alma porque es una muestra de que las cosas las estamos haciendo bien, enfocados en el bienestar de las comunidades que son nuestra verdadera familia”, comentó Andrés Boscan, líder de la RCS ‘Líderes en Acción’ en Riohacha (La Guajira).
Las RCS iniciaron su proceso a través de la capacitación en Información, Educación y Comunicación (IEC) por parte de los equipos territoriales de salud OIM, entidades territoriales y aliados para fortalecer sus conocimientos y habilidades en torno a la promoción de la salud y prevención de enfermedades, de acuerdo con las necesidades de cada uno de sus territorios.
Gracias a estos espacios, los líderes se han convertido en referentes comunitarios para orientar sobre las medidas de cuidado y autocuidado a sus familias, vecinos, población local y migrante; así como para identificar e informar oportunamente situaciones que ponen en riesgo la salud de sus comunidades, activando las rutas para la atención en salud.
“Participar en la red comunitaria me ha permitido interactuar y ser una agente de cambio que pone su granito de arena para ayudar a las nacionales venezolanos y colombianos, y a veces personas migrantes de otros países. Nos permite empoderarnos y hace de nosotras cada vez seamos mejores y que sintamos más cercana la solidaridad desde el corazón”, menciona Dora Pineda, líderesa de la RCS ‘Junt@s amasando en casa’ de Tunja, Boyacá.
Teniendo en cuenta la diversidad cultural y el enfoque diferencial, las RCS destacan la importancia de la cooperación, integración e intercambio cultural para promover comunidades más saludables, especialmente en contextos migratorios y de emergencia humanitaria.
Por eso, en esta sesión los líderes compartieron sus sentires y conocimientos respecto a la labor que realizan junto con los equipos de salud de OIM, para construir conjuntamente nuevas estrategias que fortalezcan sus acciones en pro de la salud y el bienestar psicosocial, y fortalecer las ya existentes.
“En esta Red Comunitaria he tenido un desarrollo y crecimiento personal, he aprendido a tener un mejor trabajo en equipo, y continuar para lograr los objetivos comunitarios”, comentó Damelis Piña, lideresa de la RCS ‘Unidos en Frontera’ en San Gil (Norte de Santander).
“Me siento contenta de pertenecer a la Red Vida, le doy las gracias a la OIM y al equipo, por el apoyo, por estar siempre con nosotros dándonos cada día sus conocimientos y espero que este año seamos más fuertes y crezcamos como red comunitaria para ayudar y orientar a otras personas”, afirma Marcela Cardozo, lideresa de la RCS en Necoclí (Antioquia).
Al ser ejemplo de participación y empoderamiento comunitario en salud, las RCS se han posicionado como una estrategia clave, promovida por la OIM, para fortalecer el desarrollo, el bienestar psicosocial y la integración para salvar las vidas de las poblaciones refugiadas y migrantes, y las comunidades de acogida más vulnerables.
En el marco de esta sesión, las RCS publicaron en sus respectivas páginas de Facebook, sus logros de 2023 y sueños para continuar apoyando la promoción y protección de la salud en sus territorios.
