EL VENEZOLANO COLOMBIA
El Gobierno de Joe Biden está llevando a cabo una nueva estrategia hacia Venezuela con el objetivo de abordar la agitación económica y política que ha provocado un régimen autoritario. Esta medida busca frenar la emigración masiva y estabilizar el país.
La crisis ha generado malas condiciones económicas, escasez de alimentos y un acceso limitado a la atención médica, lo que ha llevado a más de 7,7 millones de venezolanos a huir de su tierra natal, constituyendo el mayor desplazamiento en el hemisferio occidental.
Un desafío en la frontera
La inmigración sin precedentes de venezolanos representa un desafío único para la administración de Biden, especialmente en el contexto políticamente delicado de la gestión de la frontera entre Estados Unidos y México.
Esto también ha suscitado preocupaciones entre los aliados a nivel nacional, y ha llevado a los alcaldes de Chicago y Denver a mantener reuniones con altos funcionarios de la Casa Blanca para abordar la afluencia de inmigrantes en sus ciudades.
El enfoque de Biden
El enfoque del presidente Joe Biden con los líderes del hemisferio occidental es parte de un plan más amplio para abordar la migración, establecer rutas legales hacia Estados Unidos y fortalecer las economías regionales.
En este contexto, Venezuela se ha convertido en un tema clave de discusión.
Retirada de sanciones
El incremento de la migración y las próximas elecciones en Venezuela han llevado a la administración a tomar nuevas acciones. Esto incluye la retirada de las sanciones que se impusieron bajo la administración de Donald Trump.
Según un alto funcionario del Gobierno de EE.UU., se consideraron opciones de acompañar la ayuda con base en las medidas adoptadas por el régimen o «ir a lo grande desde el principio», optando por lo último.
Un paso inicial
Este cambio de enfoque se describe como una «salva inicial» destinada a explorar nuevas opciones y a respaldar un resultado electoral en Venezuela. El presidente de Chile, Gabriel Boric, expresó su agradecimiento por la eliminación de las sanciones a Venezuela.
Desafíos y evaluaciones
La flexibilización de las sanciones a Venezuela está condicionada a la capacidad del país para celebrar elecciones competitivas en 2024. Esto se produce en medio de dudas sobre si las elecciones pueden ser realmente libres y justas en un clima político represivo.
El enfoque de la Casa Blanca hacia Venezuela marca un cambio significativo en comparación con la administración de Trump. Las sanciones anteriores resultaron perjudiciales para los venezolanos y contribuyeron a un aumento en la emigración. La apertura a nuevas estrategias y la flexibilización de sanciones se basan en la posibilidad de elecciones competitivas en 2024, aunque esto genera escepticismo.
En este proceso, Estados Unidos busca colaborar con organizaciones como la Unión Europea y el Centro Carter para evaluar el proceso electoral y garantizar su transparencia. Este enfoque indica la importancia de una acción más concertada y colaborativa para abordar la crisis en Venezuela y reducir la emigración.
