EL VENEZOLANO COLOMBIA
En medio de la diáspora venezolana, la ilustradora Laura Guarisco, con El Ávila en su memoria y en su piel, presenta su conmovedora novela gráfica «Nido,» que narra la historia de la migración de sus compatriotas a Colombia y América Latina.
Este cómic es un testimonio de las experiencias de quienes han atravesado montañas y fronteras en busca de nuevas oportunidades, arrastrando consigo la nostalgia y la esperanza.
Un comic que abraza la diáspora
«Nido» capta la esencia de la migración venezolana en viñetas, representando a aquellos que han dejado su tierra natal debido a la crisis política, social y económica.
La historia se centra en Ángel, un protagonista que, al igual que la autora, cruza la frontera en busca de un futuro en Medellín.
Este cómic combina eventos reales con ficción, permitiendo que los lectores sientan el cruce de los migrantes a través de páramos y montañas, ya sea en autobús, a pie o haciendo autoestop.
La migración venezolana: Una diáspora en Colombia
Colombia ha sido el principal país de acogida para más de 2,9 millones de venezolanos que han huido de la crisis en su país.
La mayoría de ellos busca establecerse de forma permanente, y Medellín alberga a casi 240,000 de estos migrantes. Cada uno de ellos lleva consigo una historia única de sacrificio y esperanza.
El viaje de Laura Guarisco
La propia Laura Guarisco dejó Venezuela en 2016, motivada por la inflación y la falta de oportunidades. Llegó a Colombia con la doble nacionalidad y se asentó en Barranquilla, donde trabajó como dibujante en proyectos de arquitectura antes de mudarse a Medellín.
A pesar de no haber cruzado los puentes fronterizos con Táchira, Guarisco se inspiró en las noticias y las experiencias de sus amigos para crear «Nido.» A través de fotografías, documentales y exploración virtual, recreó el viaje de los migrantes con detalle en su novela gráfica.
Construyendo personajes inspirados en la diáspora
Guarisco buscó crear un personaje que reflejara la identidad venezolana y se inspiró en las historias y vivencias de amigos y conocidos para dar vida a Ángel. El cómic refleja las luchas, sacrificios y desafíos a los que se enfrentan los migrantes, desde la falta de agua hasta la escasez de alimentos. Las manifestaciones y las pérdidas personales también son parte integral de la historia.
A través de «Nido,» Laura Guarisco no solo rinde homenaje a la diáspora venezolana, sino que también ofrece una perspectiva valiosa sobre el proceso de transformación personal que experimenta un migrante. Su relación con Venezuela, aunque dolorosa al principio, se ha sanado a través del arte.
La historia es un recordatorio de la resiliencia y la adaptabilidad del espíritu humano. Para quienes se encuentran en situaciones similares, la recomendación es que encuentren formas de expresar y procesar sus emociones, como lo hizo Guarisco con su ilustración. La migración puede ser un proceso desafiante, pero también puede llevar a la creación de una nueva identidad y un nuevo hogar.