EL VENEZOLANO COLOMBIA | UN NEWS
Unos 7,2 millones de venezolanos han salido de su país en los últimos años. Seis millones de ellos viven ahora en países de América Latina y el Caribe.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) han trabajado arduamente asistiendo a esos colectivos y a las comunidades que los acogen, implementando iniciativas de regularización y documentación para que tengan acceso a servicios básicos.
Esta labor no ha terminado y requiere de la solidaridad internacional, recordaron los organismos de la ONU este martes, urgiendo a la comunidad de donantes a aumentar el apoyo tanto para los refugiados y migrantes venezolanos como para las comunidades que los acogen.
El financiamiento adicional complementaría los esfuerzos de los países vecinos para dar opciones y estabilidad a esas personas y a sus anfitriones, apuntaron las agencias de la ONU subrayando que el mundo no debe olvidarse de los migrantes y refugiados venezolanos frente a las otras crisis que humanitarias.
Con el propósito de colocar la causa de esos migrantes y refugiados en la agenda internacional y buscar fondos para continuar los trabajos de asistencia y protección, la OIM y ACNUR copatrocinarán con el gobierno canadiense y la Unión Europea una Conferencia Internacional de alto nivel que tendrá lugar en Bruselas esta semana.
La falta de integración en los países anfitriones afectaría el futuro de los migrantes venezolanos
En vísperas de la Conferencia, la OIM divulgó un informe que argumenta que la falta de apoyo temprano para la integración puede provocar en los migrantes venezolanos disparidades socioeconómicas e influir negativamente en las generaciones futuras.
El estudio está basado en más de 10.000 entrevistas con migrantes venezolanos realizadas en Perú, República Dominicana y Brasil para medir seis aspectos claves de su integración: psicológico, económico, social, lingüístico, político y capacidad de planear una ruta de viaje.
Entre los hallazgos de las entrevistas, la OIM destacó que las mujeres muestran porcentajes inferiores de integración que los hombres, independientemente del tiempo que hayan estado en el nuevo país, de su forma de ingreso y de su situación de empleo y nivel de educación.
El organismo afirmó que las medidas de integración temprana deben adaptarse a las necesidades de los grupos en situación de vulnerabilidad y sugirieron una serie de políticas y programas que podrían incluir, entre otras cosas, la regularización, el reconocimiento de habilidades y calificaciones, la capacitación, las oportunidades para la generación de ingresos y programas que aborden la salud mental, el bienestar psicosocial y la cohesión social.