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Venezuela donó a Cuba 12 generadores de electricidad que serán instalados en Guantánamo durante el primer semestre de este año. Según Yojanner Cuevas, director de la Empresa de Generación de Grupos Electrógenos Fueloil (Emgef), los motores aportarán más de 27 megavatios (MW) a la provincia.
La donación forma parte de un programa que pretende lograr la generación de 47,7 MW en Guantánamo y aliviar así el déficit energético de una de las provincias más afectadas por los apagones.
El director de Emgef explicó, durante una conferencia de prensa, que también planea obtener piezas de repuesto para los equipos, “la mayoría de importación”, y para los “sistemas auxiliares” de la generación, es decir, destiladoras de agua y depuradores de combustible.
Mientras se le dota de los equipo de generación a Cuba Venezuela durante el 2.022 sufrió de 167.618 apagones.
El funcionario cubano advirtió a la ciudadanía de que no debía hacerse muchas ilusiones con el fin de los apagones, porque el funcionamiento óptimo de los motores importados sigue dependiendo del “financiamiento en divisas”.
“La reparación de un solo motor en Alemania”, señaló, “cuesta más de 300.000 euros, y hay casi un centenar de estos equipos en el país que sobrepasaron las 12.000 horas de generación y requieren de estos mantenimientos”.
El proceso de reparaciones, que Cuevas llama, eufemísticamente, “remanufacturación”, también es necesario en los motores de la provincia
El proceso de reparaciones, que Cuevas llama, eufemísticamente, “remanufacturación”, también es necesario en los motores de la provincia. Cinco de los generadores de su empresa pueden trabajar solo dos horas cada día y otros siete deben sobrepasar el “tiempo máximo de explotación”, lo cual desembocará en una inminente avería.
Entre las alternativas que prevé Emgef está la instalación de 381 paneles solares en viviendas rurales y otros programas para el “aprovechamiento de la energía limpia”. Se instalarán 52 de estos paneles en el poblado campesino de Palenque y un mini parque fotovoltaico en el poblado Los Abiertos. Ambas localidades pertenecen al municipio guantanamero de Imías.
Después de un año crítico para el Sistema Eléctrico Nacional, los pronósticos para 2023 –luego de la baja demanda en los meses de frío– son poco optimistas. Ninguna de las centrales termoeléctricas de la Isla ha logrado la necesaria estabilidad para mantener un flujo constante de electricidad en el país.
Un ejemplo claro es la situación de la termoeléctrica Lidio Ramón Pérez, conocida como Felton, en Holguín. La unidad 1 de esta central, una de las más importantes de la Isla, suspenderá sus operaciones en febrero por “mantenimiento programado”.
La noticia la dio el viceprimer ministro cubano, el nonagenario Ramiro Valdés Menéndez, durante una reciente visita a la planta donde revisó el estado de la unidad 2, destrozada por un incendio en julio de 2022. De la inspección se supo que “continúan las acciones de desmontaje, la conservación de los componentes que se pueden reutilizar, las gestiones con proveedores de recursos muy específicos, y la fabricación de piezas de sistemas en industrias nacionales”.
Operando por debajo de sus “posibilidades de diseño”, el objetivo del mantenimiento es que la unidad 1 de la Felton alcance los 250 MW de generación y disminuir el consumo de combustible de la termoeléctrica, además de “garantizar la confiabilidad de la turbina y de la caldera”.
Aunque los directivos de la central prometen que la afectación no será demasiado “sensible” para la población, es poco probable que se eviten los apagones durante la reparación de la unidad 1. Para apoyar la generación en febrero, se supone que entrará a trabajar “un grupo de máquinas” que, de momento, también están en un proceso de reparación.
