EL VENEZOLANO COLOMBIA
El porcentaje de población en riesgo de pobreza o exclusión social creció hasta 27,8% en España y 16,6% en Alemania durante 2021, según informes publicados este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y la organización Asociación de Bienestar Paritario, respectivamente.
La tasa de riesgo de pobreza indica la proporción de la población que tiene que vivir con menos del 60 por ciento de los ingresos medios
En el caso español, el 27,8% de riesgo de pobreza en 2021 evidencia una suba de 0,8 puntos más que el año anterior, el dato más elevado desde 2016, según precisa la Encuesta de Condiciones de Vida publicada por el INE.
El informe incluye la nueva definición de tasa de riesgo de pobreza o exclusión social Arope, cuyo incremento se produjo en dos de sus tres componentes, según señaló la agencia DPA.
Así, el porcentaje de población en situación de baja intensidad en el empleo subió del 10% en 2020 al 11,6% en 2021; y el de población en riesgo de pobreza pasó del 21% al 21,7%.
Por el contrario, el porcentaje de personas residentes en hogares con carencia material y social severa se redujo hasta el 8,3% en 2021, dos décimas menos que el año anterior.
En cuanto a la situación alemana, el “Informe sobre la Pobreza 2022” de la Asociación de Bienestar Paritario indica que el riesgo de pobreza alcanzó un nuevo pico en 2021, con una marca de 16,6%.
El estudio, basado en cifras brindadas por la Oficina Federal de Estadística, señala que 13,8 millones de alemanes viven bajo el límite de la pobreza, lo que significa 600.000 más que antes de la pandemia de Covid-19.
“Los resultados son impactantes y las consecuencias económicas de la pandemia están golpeando de lleno”, afirmó el director ejecutivo de la organización, Ulrich Schneider, quien además teme que “la situación empeore” a raíz de la alta inflación (podría subir a 8,2% en junio), según advirtió.
En Alemania y otros países ricos la pobreza no se define en términos de necesidad directa, como el hambre o la falta de vivienda, sino si los ingresos del hogar son suficientes para participar plenamente en la sociedad.