EL VENEZOLANO COLOMBIA con información de Portafolio
La inflación, un fenómeno de escala mundial y que se está agravando con la crisis de la guerra en Ucrania, sigue dejando récords en América Latina, una región que si bien está acostumbrada a altos volúmenes de este fenómeno, en los últimos años estaba bajo control.
Vale la pena recordar que las presiones inflacionarias comenzaron desde el año pasado con la recuperación económica y se vislumbraba que iban a estar presentes en el desarrollo del 2022, y por ello, la región iba a ralentizar su crecimiento. Pero, en algún momento del año se preveía su control.
A la par de ello y conscientes de su crítica labor en esta materia, los bancos centrales a lo largo del continente han comenzado a elevar la tasa de interés en sus respectivas economías como uno de los mecanismos para frenar el descontrolado incremento de precios al consumidor.
Para Germán Moreno, docente de Economía en la Universidad de los Andes, “la inflación acelerada está siendo un fenómeno global. EE.UU. tiene la inflación más alta en 40 años y la Unión Europea presenta a niveles que no se veían desde 1996”.
Para el caso de América Latina, “la historia es similar: la inflación está disparada y se proyecta que siga creciendo, al menos, durante los próximos 3 meses, lo que la convertiría en un serio riesgo para la región”, reseña Moreno.
Los datos más recientes de la región corresponden a febrero. En este período, Argentina, uno de los países con la crisis económica más presente de la región, superó por primera vez a Venezuela como la economía latinoamericana con la inflación más alta.
El pasado mes, la inflación en el país del sur del continente fue de 4,7%, mientras que en Venezuela fue la mitad de ese dato, de 1,7% en caso de la medición del Observatorio Venezolano de Finanzas (independiente) y de 2,9% por parte del Banco Central de Venezuela.
Es importante recordar que el vecino país salió de la espiral hiperinflacionaria a principios del año, entre otras razones, apoyada en la dolarización transaccional que se vive en más del 60% de la economía, según estimaciones de consultoras privadas.
El ‘ranking’ del mes de febrero lo continúan Colombia (1,63%), Uruguay (1,47%) y Paraguay (1,4%), siendo con este último el cierre de los primeros lugares. Brasil (1,01%), México (0,83%), Perú (0,31%) y Chile (0,3%) se ubican en la mitad de la tabla. Por último, Ecuador (0,23%) y Bolivia (0,12%) ocupan las últimas casillas. De hecho, en este último país andino la variación de los precios estuvo concentrada en tomates, quesos y en las matrículas de las universidades.
Por otro lado, en el acumulado de 12 meses entre los meses de febrero de 2021 y 2022, las posiciones no varían mucho pero sí hay resultados interesantes.
Venezuela encabeza la lista con un acumulado de 246% y de 340%, dependiendo del OVF o el BCV. Le sigue Argentina con el 52,3%, un nivel que preocupa al presidente Fernández, quien decidió hacer “una guerra” para controlarla con un manual proteccionista.
Lejos, con un amplio margen entre el segundo y el tercer lugar, le siguen Brasil con 10,8%; Paraguay (9,3%); Uruguay (8,85%); Colombia (8,01%) y Chile (7,8%). La lista la cierran México (7,28%), Perú (6,15%), Ecuador (2,71%) y Bolivia (0,70%).
“La inflación en América Latina en general seguirá creciendo pues la cifra de febrero aún no incorpora el choque mundial en los precios en los combustibles, ni el precio de los alimentos de las recientes semanas”, dijo Moreno.
