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El pasado 5 de mayo, el líder estudiantil Lucas Villas recibió ocho disparos mientras participaba de una manifestación en el viaducto César Gaviria de Pereira.
Lucas, de 36 años, fue impactado dos veces en la cabeza y junto a él otras personas también resultaron lesionadas, Andrés Felipe Castaño Correa y Javier Darío Clavijo Rueda, uno de ellos con heridas en el cuello.
Villa fue llevado al Hospital Universitario San Jorge de la capital de Risaralda, allí permaneció varios días bajo pronóstico reservado y recibió tratamiento especializado.
El lunes, el centro médico anunció que al líder se le fue quitando paulatinamente la sedación para observar su respuesta neurológica, pero desafortunadamente presentó una isquemia, confirmando así la muerte cerebral.
Casi seis días después de luchar por su vida tras recibir los disparos, Lucas murió en una Unidad de Cuidados Intensivo (UCI) del Hospital San Jorge.
¿Quién era Lucas Villa?
El líder universitario se convirtió en un símbolo de la protesta pacífica por la alegría y actitud positiva que siempre transmitía.
Era estudiante del programa de Ciencias del Deporte y Recreación de la Universidad de Tecnológica de Pereira (UTP) y también era instructor de yoga.
De acuerdo con Sidssy Uribe, hermana de Lucas, el mensaje que él siempre quiso transmitir fue el del respeto por la protesta pacífica y los derechos humanos.
Sus profesores y amigos lo recuerdan como un líder que destacaba por sus iniciativas pedagógicas en Pereira para generar responsabilidad política y social.
También lideró proyectos y semilleros universitarios, le gustaban los deportes, durante las manifestaciones, incluso, se le vio bailando y protestando en paz, tenía un trato cordial con todos los ciudadanos e integrantes de la Fuerza Pública.
«Todos podemos morir acá, pero ¿uno cómo va a dejar a su pueblo?», fue lo que le dijo Lucas a uno de sus familiares instantes antes del ataque.
Inquieto, apasionado e interesado por muchos temas. Sus maestros aseguran que le gustaba participar en debates y se comprometía con cada proyecto que emprendía.
Su padre afirma que hablaba varios idiomas y había viajado a otros países. Sus seres queridos le han rendido homenaje de varias formas y en redes sociales rechazaron categóricamente el hecho y piden a las autoridades que esclarezcan a la mayo brevedad posible el ataque que le provocó la muerte.
«Que tus alas de libertad te lleven a lo las alto y desde allí con una fuerte vos nos cuides a todos los que seguimos luchando por un futuro con amor. Comprensión, paz y amor infinito», expresó su hermana.
La Policía Nacional ofrece una recompensa de $100 millones por información que permita la captura de las personas que dispararon contra Lucas.
“La recompensa ha sido aumentada hasta 100 millones de pesos. Esperamos que, por favor, todas las personas en el Eje Cafetero nos den información”, manifestó el director de la institución, general Jorge Luis Vargas.