
EL VENEZOLANO COLOMBIA
Como si se tratase de una asignatura pendiente, Venezuela es incapaz, por sexto a帽o consecutivo, de obtener una buena calificaci贸n en su manejo de la econom铆a. El pa铆s petrolero cierra 2020 con hiperinflaci贸n, devaluaci贸n, pobreza extrema y un 茅xodo indetenible.
La crisis econ贸mica no es novedad en el pa铆s, donde, adem谩s, los fallos el茅ctricos, la p茅sima conexi贸n a internet y la escasez de combustible o agua potable son problemas diarios y son, a la vez, los males menores presentes desde hace a帽os.
Los venezolanos se han desgastado en su lucha por sobrevivir luego de una carrera de m谩s de 2.000 d铆as en la que casi con cada amanecer surge una nueva dificultad en un pa铆s que, con un sistema sanitario depauperado, tampoco ha escapado de los embates de la pandemia por covid-19.

PRECIOS ESPUMOSOS
Un kilo de pollo costaba en enero cerca de 200.000 bol铆vares y hoy ronda los 3.000.000 de bol铆vares. As铆, los precios de los alimentos, bienes y servicios se multiplicaron varias veces a lo largo de estos 12 meses.
Hasta noviembre, la inflaci贸n acumulada se ubic贸 en 3.045,92 %, seg煤n datos de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), que sigue publicando este indicador en vista del silencio del Banco Central (BCV), el encargado en Venezuela de comunicar estos datos.
芦Nosotros estamos estimando que va a cerrar el a帽o en cerca de 4.000 %禄, dijo el economista y diputado Jos茅 Guerra.
El pron贸stico, aunque negativo, no es tan devastador como el 7.374, % en que cerr贸 la inflaci贸n en 2019 ni tan hist贸rico como el pico de 1,7 millones % que alcanz贸 en 2018.
Sin embargo, la incesante subida de los precios sigue arruinando a unos empobrecidos consumidores, cuya compra es cada vez m谩s peque帽a.
BOL脥VARES DEPRECIADOS
La pandemia instaur贸 de facto una dolarizaci贸n informal, al punto de que hoy, 7 de cada 10 operaciones se concretan con la divisa estadounidense en Venezuela, cuya Constituci贸n establece que el bol铆var es la 煤nica moneda de curso legal.
Los venezolanos est谩n cada d铆a m谩s sedientos de d贸lares y m谩s apurados en salir de los bol铆vares, unos billetes que se deval煤an a veces en cuesti贸n de horas.

Entre la primera y la 煤ltima semana del a帽o, el bol铆var se depreci贸 un 95,30 % pues, dicho de otro modo, para comprar un d贸lar estadounidense en el pa铆s caribe帽o se necesitaban 48.709 bol铆vares en enero y ahora, a finales de diciembre, la divisa norteamericana cuesta 1.062.380 bol铆vares.
Entonces, explica Guerra, esta dolarizaci贸n 芦es la respuesta ante la destrucci贸n del bol铆var como moneda, que est谩 dejando de existir y solo queda para pagos menores禄.
SUELDOS MISERABLES
Seg煤n el economista, cerca del 30 % de la poblaci贸n venezolana recibe d贸lares por concepto de remuneraci贸n laboral, remesas enviadas desde el extranjero o el uso de activos, lo que deja a unos 20 millones de ciudadanos sin acceso a esta divisa o a expensas del salario local, una clara condena a la pobreza extrema.
El sueldo m铆nimo, cuyo monto es fijado por el Ejecutivo, empez贸 el a帽o en 3,21 d贸lares mensuales y, pese a un aumento aplicado que fue devorado por la inflaci贸n y la devaluaci贸n, ahora se ubica por debajo de los 2 d贸lares al mes, con lo que hoy, solo para comer, una familia necesita m谩s de 100 salarios.
La dolarizaci贸n informal, insiste Guerra, 芦est谩 causando un estrago muy intenso pues est谩 agravando la desigualdad social禄 entre aquellos que tienen o carecen de divisas, una advertencia replicada por varios estudios que se帽alan que la pobreza extrema ha alcanzado a casi el 80 % de la poblaci贸n.
Adem谩s, las numerosas organizaciones humanitarias que operan en el pa铆s aseguran que hay necesidades b谩sicas insatisfechas en un tercio de la poblaci贸n, la misma cantidad de venezolanos que solo reciben un salario o una pensi贸n, es decir, unos 10 millones de obreros y ancianos que devengan menos de 2 d贸lares al mes.
LA HUIDA
Como ha ocurrido en el 煤ltimo sexenio, este a帽o creci贸 el n煤mero de venezolanos que abandonaron su pa铆s e incrementaron la cifra total hasta los 5,4 millones de emigrantes, seg煤n datos actualizados en noviembre por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).
Ni siquiera el coronavirus y el cierre casi total de fronteras vigente desde marzo ha detenido a miles de ciudadanos que, incluso caminando, llegan a los estados fronterizos con Colombia y Brasil, una situaci贸n que Efe ha podido constatar, para cruzar los l铆mites a trav茅s de pasos irregulares.
El r茅gimen ha reiterado que las cifras de migraci贸n que reportan los pa铆ses receptores de venezolanos est谩n adulteradas, si bien se niega a presentar un balance sobre estos movimientos migratorios e insiste en que solo este a帽o unos 200.000 nacionales retornaron a su patria.
Los que se van de Venezuela huyen de una econom铆a que lleva m谩s de 20 trimestres de contracci贸n, es decir, un pa铆s en el que cada vez hay menos oportunidades y en el que es m谩s probable caer en la miseria que prosperar.