EL VENEZOLANO COLOMBIA | ESTOY EN LA FRONTERA
La reapertura de la frontera ha sido el tema más debatido entre autoridades locales y regionales y gremios, comerciantes y empresarios, quienes han señalado que la reactivación económica de la ciudad está directamente relacionada con la normalización del paso de venezolanos por los tres puentes fronterizos.
La Gobernación de Norte de Santander, las Alcaldías de San José de Cúcuta, Villa del Rosario y Puerto Santander, la Cámara de Comercio de Cúcuta, la Cámara Colombo Venezolana, gremios empresariales, el Instituto Departamental de Salud y autoridades de seguridad, control migratorio y aduanero, trabajaron conjuntamente en un documento, en el cual se sugieren propuestas y acciones que permitan una apertura gradual ordenada y controlada de la frontera, contando con protocolos de bioseguridad.
Presentan recomendaciones en cuatro frentes: sector salud, sector económico, migración y control fronterizo y asuntos sociales y humanitarios.
Las propuestas
Apoyo de Cooperación Internacional para establecer un área de protocolos COVID-19.
Gestionar recursos para hacer posibles los procesos tecnificados de paso, tales como el de identificación biométrica.
Coordinar con el Área Metropolitana de Cúcuta, los protocolos de Bioseguridad que deberán aplicarse en el transporte público que llevará a los migrantes de los puentes internacionales a los diferentes puntos de abastecimiento de la ciudad.
La entrada de migrantes podría habilitarse por horas o por días, para evitar aglomeraciones dentro de los puntos de abastecimiento y/o acopio. De igual manera, se podrían establecer rutas específicas para garantizar un mayor control de los desplazamientos que se hagan en función de esta estrategia.
Es posible que, por cuenta de las limitaciones generadas por la pandemia, no sea permitida la libre circulación de personas (importante definir un tablero de control para hacerle seguimiento) entre los dos países. Ese escenario, aunque entendible por razones sanitarias y epidemiológicas, tendría un efecto contraproducente en el proceso de recuperación económica de la frontera y del país. Así mismo, impactaría de forma negativa a los ciudadanos venezolanos que tienen cada vez más inconvenientes para acceder a los diferentes productos de la canasta básica familiar.
Por esto, consideramos prudente tener un plan B llamado “Zona de Abastecimiento”. Esta zona, sería un circuito comercial en donde productores y comerciantes ofrezcan los productos, bienes y servicios que presentan una alta demanda por parte de los migrantes venezolanos. Dichas zonas podrían estar localizadas en el puente de Tienditas o en el área de La Parada .
Esta actividad, aunque reduciría los riesgos de contagio por la pandemia en la ciudad, podría significar un gran esfuerzo logístico; teniendo en cuenta que sería necesario contar con un anillo de seguridad específico para esta zona, además de baños públicos, acordonamiento del perímetro y protocolos de bioseguridad permanentes para los trabajadores que se dispongan a laborar en este punto.
Con el fin de poner en funcionamiento estas zonas de abastecimiento, deben incluirse entidades como del INVIAS, la DIAN y de Migración Colombia; y quienes, además, tendrían que establecer las condiciones migratorias de las personas que ingresarán y la forma en que los establecimientos comerciales facturarían.
Reactivación del paso de carga por los puentes
Si bien el paso de carga no ha sido restringido desde nuestro Gobierno, se hace necesario se continúe, dentro del marco establecido y permitido; con los acercamientos dados con representantes de los gremios del vecino país para restablecer el intercambio económico binacional de manera formal y legal.
Activar de manera inmediata los procedimientos de transporte de carga, logístico y aduaneros que posibilitan las operaciones de exportación e importación en los pasos habilitados en Norte de Santander. Dar continuidad en las mesas de trabajo con actores en el Táchira y ampliar la participación de los diferentes actores para lograr mejor comunicación con actores públicos.
Tecnología al servicio de la formalización fronteriza
Algo que ha quedado en evidencia a partir del cierre del paso peatonal de los puentes fronterizos; es que, existe un comercio ilegal a través de los pasos irregulares. Por canales virtuales informales, personas desde Venezuela realizan pedidos a Colombia y dichos pedidos son transportados a lo largo de los pasos ilegales. De esta situación irregular, se podría adoptar el uso de la tecnología para que la población. venezolana pueda garantizar su abastecimiento de productos y se evite un permanente flujo de personas entre los dos países.
Para garantizar esta actividad, sería necesario establecer empresas domiciliarias o de delivery, que pudieran llevar pedidos hasta por un monto específico (el permitido por la DIAN) de víveres debidamente facturados en establecimientos de comercio legal, ubicados en los municipios fronterizos, hasta una zona determinada en territorio venezolano.
Corredor humanitario
Con esta medida se permitiría el paso de los padres de familia, representantes o acudientes de los niños, niñas o adolescentes matriculados en las Instituciones Públicas del Municipio para acceder a los complementos alimenticios que entregan el Programa de Alimentación Escolar (PAE) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) de las Naciones Unidas.
El paso de los padres, representantes o acudientes y de los estudiantes que vengan a la ciudad de Cúcuta, a realizar el proceso de matrícula para el año 2021, antes de finalizar la primera semana del mes de diciembre, de acuerdo con la programación del proceso realizada por la SEM Cúcuta.
También para que los estudiantes residentes en Venezuela puedan cruzar la frontera a realizar la respectiva aplicación de las “Pruebas Saber 11 Calendario A”, a realizarse los días 14 y 15 de noviembre de 2020.
Sería paso permanente de los estudiantes residentes en Venezuela para el año 2021, con el fin de que puedan acceder a su derecho fundamental a la educación, una vez se implemente el modelo de alternancia y retorno gradual a las aulas.
Se debe activar un protocolo de bioseguridad para habilitar el paso de 3.878 estudiantes, con el fin de que estos logren realizar sus trámites, utilizando estrategias de pico y cédula durante una semana.
Este sería el piloto para hacer seguimiento y monitorear el proceso. Mantener un apoyo con las autoridades.