EL VENEZOLANO COLOMBIA
Cerca de 100 bailarines y artistas de la ciudad colombiana de Cali (suroeste) realizaron un plantón este jueves para exigir la celebración de la Feria de Cali 2020, una de las más tradicionales del país, y poder así reactivar su sector, paralizado desde marzo por la pandemia del coronavirus.
«Hemos decidido reunirnos para manifestarnos ante la comunidad en general y acudir a su solidaridad con el sector de la cultura y el entretenimiento porque es un sector que ha estado totalmente devastado en esta pandemia», dijo a Efe el director de la escuela de baile Salsa Viva y Tango Vivo, Edwin Chica.
Los artistas se tomaron la Plazoleta Jairo Varela, de Cali, capital del departamento del Valle del Cauca, para apoyar la propuesta del alcalde de la ciudad, Jorge Iván Ospina, de hacer la feria de manera virtual, del 25 al 30 de diciembre, evento que costará unos 11.000 millones de pesos (un poco más de tres millones de dólares).
La Feria de Cali, en la que se rinde culto a la salsa, el género caribeño que tiene en esta urbe de la cuenca del Pacífico su capital, se celebra cada año desde hace seis décadas y tiene como protagonistas la música, el baile, los autos antiguos, las comparsas, las verbenas populares y la temporada de toros.
FERIA PARA GENERAR EMPLEO
Según Chica, la cancelación de una de las fiestas más prestigiosas del continente generaría un revés en los artistas que han «estado casi un año parados», pero su celebración será «una oportunidad de generarle empleo a toda la cadena cultural, a los bailarines, a los músicos, a los actores, a las empresas productoras de eventos».
Además, dijo que los recursos destinados para el evento no pueden redirigirse a otros rubros si este se cancela y reconoció que aunque a la inversión hay que hacerle veeduría, «no se puede dejar de hacer esa celebración» que beneficiará a más de 14.000 familias de los artistas.
«La cultura necesita esta actividad para dinamizarnos y poder terminar el año con un aliciente económico. Realizaremos un espectáculo de altísima calidad para que las familias lo disfruten en la calidez de sus hogares», agregó.
DEBATE POR RECURSOS PÚBLICOS
Según el secretario de paz y cultura ciudadana de Cali, Danis Rentería, el evento ayudará a reactivar la economía de las escuelas de salsa -de las que hay más de 100 en la ciudad-, de las costureras que elaboran los trajes y de quienes confeccionan los calzados especiales de los bailarines.
El funcionario aseguró que la feria generará «muchísimos empleos» en el sector artístico porque «esa gente hace un año se viene preparando exclusivamente para este evento» y valoró que si esa es «la oportunidad para ellos poder reactivar la economía de su sector, ¿por qué no apoyarlos?».
Por su parte, el concejal Roberto Ortiz, quien está en contra de que la celebración se haga este año, dijo que con más de 2.000 muertos por coronavirus y más de 900 asesinatos, Cali «tiene muy poco» qué celebrar.
Agregó que los 11.000 millones de pesos que se destinarán para el evento se podrían «manejar en otros frentes», y propuso que esos recursos se dispongan para entregar una renta básica a los artistas que están sin ingresos.
«Se han cancelado en el mundo grandes eventos como el Carnaval de Río de Janeiro, el Carnaval de Barranquilla, la Fiesta de Negros y Blancos en Pasto y recientemente se canceló el Festival de la Canción de Viña del Mar del próximo año, ¿entonces por qué la Feria de Cali no se puede cancelar?», dijo.