Se necesita una nueva estrategia con Venezuela | Por: Ronal Rodr铆guez

鉃 El autor es Investigador y vocero del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario y coordinador del proyecto: Edificando consensos para la integraci贸n e inclusi贸n de la movilidad humana proveniente del Observatorio con la Fundaci贸n Konrad Adenauer

El presidente Nicol谩s Maduro es quiz谩s el peor presidente de Venezuela para Colombia y los colombianos, lo ha sido para los connacionales en el hermano pa铆s, para la relaci贸n bilateral y de frontera, incluso ha cuestionado la delimitaci贸n terrestre y ha pretendido imponer la postura venezolana en la delimitaci贸n mar铆tima, pero lo peor es el abordaje a la crisis de movilidad humana causada por el chavismo.

En materia migratoria Maduro ha implementado una estrategia de instrumentalizaci贸n que va del negacionismo, pasando por el aprovechamiento de la tragedia humana, llegando a la estigmatizaci贸n y persecuci贸n de la poblaci贸n en condici贸n de movilidad tanto venezolana como colombiana. El hijo de Teresa, una mujer colombiana que migr贸 a Venezuela buscando oportunidades se convirti贸 en el presidente venezolano m谩s hostil con Colombia y los colombianos.

La relaci贸n entre Colombia y Venezuela se encuentra en su peor momento, no hay relaciones diplom谩ticas, tampoco consulares, los pasos fronterizos oficiales se encuentran cerrados, porque finalmente la frontera nunca se cierra, y lo que se sabe es que no existe ning煤n canal de comunicaci贸n entre los gobiernos nacionales.

A lo cual se suma que Colombia es uno de los m谩s de cincuenta pa铆ses que reconoce a Juan Guaid贸, pero uno de los pocos que niega a Nicol谩s Maduro, muchos de los Estados que reconocen al l铆der opositor mantienen relaciones diplom谩ticas con el poder factico de Maduro y conservan las relaciones consulares para asegurar la protecci贸n de sus connacionales en territorio venezolano.

La estrategia en pol铆tica exterior del gobierno de Iv谩n Duque frente a la Venezuela chavista no funcion贸, las sanciones internacionales, el cerco diplom谩tico y la internacionalizaci贸n de la crisis de movilidad humana no han dado los resultados esperados y el actual contexto de la COVID-19 transforma el escenario y plantea la necesidad de una reformulaci贸n de la relaci贸n bilateral.

Las afugias que causan las sanciones internacionales las transfiri贸 el chavismo a la poblaci贸n, incluso las usa discursivamente para justificar la debacle econ贸mica y social, y dichas sanciones en su mayor铆a norteamericanas permiten que sectores de la izquierda latinoamericana y europea justifiquen su apoyo a la dictadura. Si bien, han cerrado los espacios de acci贸n de algunos miembros de la camarilla chavista, la realidad es que la escasez y precariedad asociadas a las sanciones les han dado m谩s poder de control sobre la poblaci贸n. Y en el contexto de pandemia ha implicado que organismos protectores de los derechos humanos soliciten su levantamiento ante las graves repercusiones que pueden tener en el manejo de la COVID-19.

De otro lado el cerco diplom谩tico, ha resultado adverso a los intereses de Colombia y de la regi贸n. El aislamiento de la Venezuela chavista se convirti贸 en una ventana de oportunidad para las potencias no democr谩ticas. La Revoluci贸n Bolivariana que ya ten铆a una posici贸n complaciente con China, Rusia, Ir谩n y Turqu铆a, con el aislamiento de las democracias occidentales ha terminado aceptando las pretensiones de estas potencias extracontinentales que aprovechan la debilidad venezolana para negociar e imponen condiciones que comprometen el futuro del pa铆s, pero tambi茅n de la regi贸n. El chavismo en su af谩n de sobrevivir ha convertido a Venezuela en un bot铆n de saco, que ya tiene en la degradaci贸n medioambiental uno de sus mayores efectos en el largo plazo.

Y en la internacionalizaci贸n de la crisis de movilidad humana Colombia no ha logrado coordinar las pol铆ticas de recepci贸n migratoria. Chile, Per煤 y especialmente Ecuador han implementado medidas que convierten a Colombia en un 鈥減a铆s tap贸n鈥, sin los recursos que esa estrategia tiene en otras latitudes. Pero en el actual contexto de emergencia en salud p煤blica la situaci贸n se complejiza, los recursos de la cooperaci贸n internacional sufrir谩n un importante recorte, se priorizar谩n en la recuperaci贸n socioecon贸mica post-COVID19 de los pa铆ses m谩s pobres, y dependeremos de la estrategia regional para afrontar la nueva realidad en los pr贸ximos a帽os. Todo depender谩 si asumimos la estrategia del aislacionismo, el cierre fronterizo y la paranoia sanitaria, o por el contrario impulsamos una respuesta conjunta e integral de la regi贸n. Pero independientemente el Estado colombiano debe reflexionar sobre los efectos que tendr谩 la vecindad con Venezuela en la implementaci贸n de la estrategia que se elija.

La relaci贸n bilateral con Venezuela debe replantearse, la salida r谩pida de la Revoluci贸n Bolivariana del poder cada d铆a tiene menos posibilidades, por m谩s que algunos sectores de la oposici贸n venezolana vivan afirmando que las condiciones est谩n dadas y que es inminente la ca铆da de la dictadura, la crisis de la COVID-19 le ha permitido al chavismo acariciar sus m谩s oscuras pretensiones totalitarias y la emergencia en salud p煤blica le permitir谩 al r茅gimen permanecer en el poder.

Se debe contemplar una diplomacia de respuesta en contexto de salud p煤blica para la convivencia entre Colombia y Venezuela. Lo primero es recobrar las relaciones consulares con el r茅gimen venezolano, no para reconocerlo o legitimarlo, sino para adelantar la protecci贸n de los ciudadanos colombianos que permanecen en territorio venezolano, los 煤ltimos datos fiables estimaban una presencia de 3,4 millones de colombianos en Venezuela que no pueden quedar desamparados ante las arremetidas de la dictadura.

Y segundo, convertir la Tarjeta de Movilidad Fronteriza TMF en un instrumento de largo plazo con identificaci贸n biom茅trica que regularice la entrada y salida de venezolanos en direcci贸n a convertir la frontera en un espacio ordenado y seguro de abastecimiento y cooperaci贸n con el pueblo venezolano, no con la dictadura. Y as铆 permitir la reapertura de la frontera y la atenci贸n de las necesidades de la poblaci贸n venezolana.

Las dictaduras no suelen caer cuando se exhibe su atrocidad, por el contrario, terminan usando ese miedo para dominar, se logra m谩s cuando el ciudadano es consciente de la precariedad a la cual lo est谩n sometiendo y ah铆 la frontera colombiana puede jugar un papel definitivo en la recuperaci贸n de la democracia venezolana.

Publicaciones relacionadas

Bot贸n volver arriba
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines anal铆ticos y para mostrarte publicidad relacionada con sus preferencias en base a un perfil elaborado a partir de tus h谩bitos de navegaci贸n. Contiene enlaces a sitios web de terceros con pol铆ticas de privacidad ajenas que podr谩s aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el bot贸n Aceptar, acepta el uso de estas tecnolog铆as y el procesamiento de tus datos para estos prop贸sitos. M谩s informaci贸n
Privacidad