La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, calificó de «auténtica masacre» la muerte de diez personas en la capital colombiana «en presuntos hechos de abuso policial» que ocurrieron en las violentas protestas de las últimas 48 horas en la ciudad.
«Lo que ha ocurrido en las ultimas horas es brutal, es grave, es una auténtica masacre de jóvenes en nuestra ciudad. Así como nos duelen las masacres en Nariño, Cauca o el Catatumbo, nos duelen en nuestra ciudad», expresó López tras reunirse con el presidente Iván Duque y con el procurador general, Fernando Carrillo.
La referencia de López es al más de medio centenar de masacres que han sido perpetradas este año en 17 de los 32 departamentos de Colombia, según datos del Observatorio del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
BALANCE DE LAS PROTESTAS
Las manifestaciones desatadas por la muerte de Javier Ordóñez, un hombre de 46 años que fue sometido con brutalidad por dos policías en el barrio Santa Cecilia, en el noroeste de la ciudad, se han esparcido por todo el país y dejan hasta el momento 13 fallecidos, 10 de ellos en Bogotá y tres en la vecina localidad de Soacha.
La alcaldesa López señaló hoy que desde el miércoles 72 ciudadanos han sido heridos por armas de fuego en Bogotá y que «hubo uso indiscriminado de armas por parte de algunos miembros de la Policía Nacional» para controlar las manifestaciones que se tornaron violentas.
«Hubo actos vandálicos también. Reconocemos la justa indignación y protesta de la ciudadanía, pero también por supuesto hay intereses y actos criminales. No se queman 15 buses de Transmilenio por jóvenes exaltados, ni se incendian ni vandalizan 45 CAI (Comandos de Atencion Inmediata de la Policía) por indignación, sino por manos criminales», añadió.
Igualmente señaló que se han documentado «119 denuncias de abuso policial en 48 horas», mientras que la cifra en lo que iba del año era de 141.
REUNIÓN CON DUQUE
La brutalidad policial que causó las protestas y la ocurrida durante las manifestaciones ha puesto sobre la mesa una iniciativa para que esa institución sea reformada y pase de depender del Ministerio de Defensa al de Interior.
En ese sentido, López llevó a la reunión con Duque una propuesta para «que se reconozca de una vez por todas que la Policía debe ser un organismo civil, que no tengan ni formación, ni operación, ni fuero militar, sino que sea un organismo civil que responda ante la ciudadanía y ante la justicia ordinaria».
«El señor presidente dice que el descarta el plan, esa reforma. Yo lo lamento mucho porque creo francamente que se necesita. Pero le agradezco al procurador, que me ha dicho que va a examinar la probabilidad de convocar una reforma interinstitucional (…) para proponerle al Congreso esa reforma», añadió.
López dijo además que tanto a Duque como Carrillo les entregó cerca de hora y media de grabaciones de video «donde se muestra con claridad a miembros de la fuerza pública disparando indiscriminadamente en diferentes barrios de Bogotá».
La alcaldesa también los invitó a un acto de reconciliación y perdón este domingo para «reconstruir la confianza entre todos, respetando los derechos y los deberes de los ciudadanos y las instituciones, para que retomemos el propósito de vivir en una ciudad en paz».
«He invitado al presidente a que participe en ese acto de reconciliación y perdón con nuestros jóvenes y ciudadanía. No es destruyendo la vida de nuestros jóvenes como va a salir adelante Bogotá ni Colombia, es reconstruyendo la confianza, es la acción ciudadana no violenta, la que puede recobra la confianza», expresó.