La persistente escasez de combustible en el interior de Venezuela llegó en los últimos días a la capital, Caracas, que se ha mantenido al margen de las extensas filas en las estaciones de servicios y cortes de electricidad que enfrentan casi a diario los 23 estados del país.
“¡SALIENDO A ABASTECER! El llenadero de PDVSA en Guatire, Edo. Miranda se mantiene trabajando con total normalidad. Nuestras unidades de Transporte de Combustible de PDVSA saliendo HOY #31DIC a despachar #PDVSAProduce”, tuiteó la petrolera venezolana en su cuenta en la red social Twitter.
El país de la OPEP, que posee las mayores reservas de crudo del mundo, enfrenta oleadas de escasez de combustible que ha afectado y cambiado la rutina de los venezolanos que deben esperar en largas filas varios días para cargar combustible.
Las sanciones de Estados Unidos, destinadas a acelerar la salida del régimen de Nicolás Maduro, han elevado los costos y dificultado la importación de combustible, mientras las refinerías padecen por la falta de repuestos y mantenimiento.
PDVSA no había comentado sobre la reciente escasez desde comienzos de diciembre, en un país que enfrenta su sexto año consecutivo de recesión con hiperinflación, que ha generado la huída de un poco más de 4 millones de venezolanos, según datos de la ONU.
“ASÍ SE CIERRA EL AÑO”, se lee en unos de los seis tuit de la petrolera, junto con una imagen de una gandola mientras cargaba combustible en el estado Anzoátegui, una de las regiones petroleras más grandes del país.
A principios de mes, en la ciudad de El Tigre, en el centro de Anzoátegui, donde se perforó el primer exitoso pozo petrolero de la región en 1937, las filas de más de 200 autos esperaban en un puñado de estaciones de servicios que permanecían cerradas.
“Es insólito que en nuestro país, que es un país rico en petróleo, no hay nada de gasolina”, dijo a Reuters Daniel Guevara, un agricultor de 33 años, de una hacienda cercana que llegó a las 4 de la mañana para hacer fila en la estación de PDVSA.
La creciente escasez se produjo después de que las importaciones de combustible cayeron a 135.000 barriles por día (bpd) en noviembre, por debajo de 210.000 bpd en octubre, según los datos de seguimiento de tanqueros de Refinitiv Eikon y documentos internos de PDVSA.
Con información de Reuters
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