EL VENEZOLANO COLOMBIA | VOA
Uno de los alimentos más típicos y representativos para el venezolano es, sin lugar a duda, el queso blanco fresco. Y ahora, en Bogotá, gracias a un emprendimiento familiar, los colombianos han caído rendidos ante el sabor de todas las variedades de quesos típicos y tradicionales de Venezuela. Jair Díaz nos cuenta la historia de estos migrantes que vieron en el éxodo, una oportunidad.
Sacándole provecho al éxodo forzado de Venezuela, esta familia decidió enaltecer sus raíces. Oriundos de Carora, en el estado Lara, se proponen reproducir en Colombia el gusto por los típicos quesos frescos de su infancia.
“Durante tres meses de prueba, de error y ensayo, hasta que por fin lo logramos”, indicó Luis Fernando González, migrante venezolano y uno de los responsables del proyecto,
Desde hace tres años la frescura, diversidad, texturas y el sabor característico a leche de vaca recién ordeñada del queso venezolano, llegaron a Colombia bajo el nombre de Lácteos Carora. Y lo que comenzó como un emprendimiento, casi artesanal en 2018, ahora distribuye sus simbólicos productos a, cada vez, más países.
“No fue sino hasta el 2020 que Lácteos Carora Colombia ya inicia un margen de ganancia importante que nos permite vivir”, agregó Gónzalez.
Sus productos hoy tienen cautivados a los paladares colombianos… y a los venezolanos que residen en este país, les regala un pedacito de su tierra en la mesa, aún lejos de casa.
“Porque estos quesos son muy tradicionales, muy artesanales. No son unos quesos que uno conseguía en los supermercados”, expresó Juvilmar Liseth Gutiérrez.
Y pensando en ese sabor de sus recuerdos, decidieron elaborar el famoso queso de mano venezolano, característico por su forma redonda, con la típica receta artesanal. Hoy día, estos empresarios generan empleo a coterráneos y ven con esperanza el crecimiento de su microempresa en este año que recién comienza.
“Alcanza para pagar todos los compromisos y vivir viviendo, vivir bien”. dijo Gónzalez.
Luis Fernando González, creador del negocio, cuenta que comenzó comprando 40 litros de leche fresca a unos productores colombianos de fincas cercanas en Cundinamarca, y a los meses incrementó la materia prima para hacer más quesos… Y al contrario de lo que ocurrió con la mayoría, la pandemia sirvió para que su negocio fuera viento en popa.
“llega la pandemia ya Lácteos Carora… ya tenía unos clientes y de esa forma, creería yo, que en ese momento por la ansiedad, la gente en casa consumía más y la gente pedía más y pedía y pedía al punto de que, bueno, ya hoy por hoy somos un referente acá en Colombia”. comentó Gónzalez.
A pesar de las adversidades que han transcurrido con los años, esta familia lejos de desanimarse le imprimió más entusiasmo y en el conjunto residencial donde viven, en Bogotá, tomaron en arriendo un apartamento para instalar una fabrica exclusivamente para la elaboración artesanal del queso.
«Se ha convertido en la bendición para la familia porque es lo que nos ha mantenido al frente y ellos, desde un principio, empezaron poco a poco; pero ahí van levantándose», comentó Zulany María Gutiérrez.
“Lácteos Carora Colombia para mí se ha convertido en una manera de seguir adelante y cumplir mis sueños”, culminó indicando Jorge Luis Ponce Gutiérrez.
Como ellos mismos dicen, estos migrantes venezolanos están haciendo patria lejos de casa; por lo que se esmeran para que cada trozo de sus quesos, refleje su esfuerzo por salir adelante y deje huella del ADN de la gastronomía de Venezuela en Colombia y el mundo.
