EL VENEZOLANO COLOMBIA
En Venezuela, la represión del régimen de Nicolás Maduro no tiene límites y alcanza incluso a menores de edad, quienes son detenidos durante protestas pacíficas. El caso de Mariana González, una joven de 16 años arrestada tras las elecciones presidenciales del 28 de julio, se ha convertido en un símbolo de las violaciones de derechos humanos en el país.
Su liberación, lograda tras la presión de su familia, organizaciones de derechos humanos y líderes como María Corina Machado, evidencia la grave situación que enfrentan los presos políticos menores de edad en Venezuela.
La liberación de Mariana González: un caso que conmocionó a Venezuela
El Ministerio Público anunció recientemente la liberación de Mariana González, una adolescente detenida tras las elecciones presidenciales del pasado julio. En el marco de protestas que denunciaron un fraude electoral, más de 2.400 personas fueron arrestadas, incluyendo 198 niños y adolescentes. Mariana, de solo 16 años, fue apresada injustamente y su caso ha sido denunciado por diversas organizaciones como un reflejo de la represión sistemática en el país.
El drama de los menores presos políticos
Según el Foro Penal, al menos 48 adolescentes entre 14 y 17 años permanecen encarcelados en Venezuela por razones políticas. La Misión de Determinación de los Hechos de la ONU también ha documentado la detención de 158 niños durante las manifestaciones, algunos enfrentando acusaciones de terrorismo o incitación al odio. Estas imputaciones buscan criminalizar el derecho a la protesta y perpetuar un clima de intimidación.
El papel de María Corina Machado en la denuncia
María Corina Machado, líder opositora, utilizó el caso de Mariana González para responder al embajador de Portugal en Venezuela, quien pidió neutralidad frente al régimen de Maduro. Machado rechazó la equidistancia como una postura inmoral e hizo un llamado a reconocer las violaciones de derechos humanos. Su mensaje destacó la lucha por la justicia y visibilizó el sufrimiento de jóvenes como Mariana, víctimas de torturas y detenciones arbitrarias.
El testimonio de Mariana: un grito desde la prisión
Durante su detención, Mariana González escribió una desgarradora carta en la que expresó: “Prefiero matarme antes que seguir sufriendo”. Este testimonio revela el impacto emocional y físico que enfrentan los presos políticos menores de edad. La carta, difundida por DDHH Vente Venezuela, refleja la desesperación y el daño irreparable causado por las políticas represivas del régimen.
Exigir justicia y libertad para todos los detenidos
Organizaciones como el Comité por la Libertad de los Presos Políticos han reiterado la urgencia de liberar a todos los menores detenidos y exigir justicia contra los responsables. La situación de más de 1.900 personas detenidas durante las protestas no solo deja cicatrices profundas en las víctimas, sino que también representa un desafío para la lucha por la democracia y los derechos humanos en Venezuela.
El caso de Mariana González pone en evidencia la brutalidad de un régimen que no respeta los derechos de los más vulnerables. Aunque su liberación representa una victoria, aún quedan decenas de menores y miles de adultos encarcelados por razones políticas. La lucha por justicia, liderada por activistas, familiares y figuras como María Corina Machado, continúa siendo fundamental para poner fin a estas atrocidades y construir un futuro de libertad y dignidad para Venezuela.