EL VENEZOLANO COLOMBIA
En un reciente mitin realizado en Nueva York, el expresidente y candidato republicano Donald Trump lanzó una serie de acusaciones contra la política migratoria actual, centrándose en los migrantes venezolanos.
Trump aseguró que Caracas es ahora una ciudad más segura debido a la supuesta expulsión de criminales hacia Estados Unidos. Asimismo, prometió medidas drásticas si regresa al poder, incluyendo deportaciones masivas y el envío de fuerzas federales para combatir supuestas pandillas venezolanas en ciudades como Aurora, Colorado.
Acusaciones contra Venezuela y los migrantes
Donald Trump afirmó que Venezuela ha reducido sus índices de criminalidad porque, según él, el gobierno ha permitido la salida de sus delincuentes hacia el norte. Durante su intervención, el expresidente dijo que las calles de Caracas están más seguras porque los traficantes de drogas y las pandillas han sido expulsados del país, indicó CNN.
Trump, conocido por su retórica antiinmigrante, sugirió que las cárceles venezolanas están prácticamente vacías debido a este éxodo de criminales. Además, señaló que la llegada de migrantes a Estados Unidos ha alcanzado niveles récord, lo que calificó como una «invasión». Estas declaraciones refuerzan su postura de mano dura en temas migratorios, especialmente en su crítica a las políticas de la actual administración demócrata.
Promesas de seguridad en Estados Unidos
En su discurso, Trump también prometió tomar medidas enérgicas contra las supuestas pandillas venezolanas que, según él, operan en ciudades estadounidenses como Aurora, Colorado. El expresidente anunció que, de ganar las elecciones, enviará fuerzas federales para «liberar» a esta ciudad de lo que describe como una ocupación de pandillas inmigrantes.
A pesar de la gravedad de sus declaraciones, el alcalde de Aurora, Mike Coffman, negó la existencia de una situación similar en su ciudad. Coffman, también republicano, aclaró que las acusaciones de Trump no reflejan la realidad local, donde no se registra una toma por pandillas extranjeras. Este cruce de versiones pone en duda la veracidad de las afirmaciones del exmandatario, pero subraya la estrategia de Trump de capitalizar el miedo a la inseguridad y el descontrol migratorio.
Críticas a la política migratoria demócrata
A lo largo de su discurso, Trump dirigió severas críticas hacia la actual política migratoria de la administración Biden, representada en su discurso por la vicepresidenta Kamala Harris. Según Trump, las políticas actuales han permitido la entrada «masiva» de migrantes, lo que ha provocado un colapso en el sistema y una crisis en las ciudades fronterizas.
En su retórica, el exmandatario insistió en que medidas como el parole humanitario y el uso de la aplicación CBP One, utilizada para gestionar citas en la frontera, están siendo explotadas por los carteles de tráfico de personas. Trump reiteró su intención de eliminar estas políticas, describiéndolas como mecanismos que facilitan el ingreso de criminales al país.
Deportación masiva y eliminación de ciudades santuario
Otra de las promesas clave de Trump en su mitin fue la reinstauración del Título 42, una norma que permitió durante la pandemia la expulsión rápida de migrantes por razones sanitarias. El exmandatario dejó claro que, si es elegido nuevamente, implementará un programa de deportación masiva de inmigrantes indocumentados y pondrá fin a las llamadas «ciudades santuario», donde las autoridades locales limitan la cooperación con las políticas federales de inmigración.
El expresidente argumentó que estas medidas son necesarias para proteger los empleos de los ciudadanos estadounidenses, particularmente de las comunidades afrodescendientes y latinas, a quienes, según él, la llegada de migrantes ha afectado gravemente. En su discurso, destacó que las políticas migratorias actuales están «robando» oportunidades laborales a estos grupos, lo que ha generado tensiones sociales.
Un mensaje divisivo para las elecciones
El discurso de Donald Trump en Nueva York refuerza su estrategia de apelar a los sentimientos de inseguridad y miedo frente a la inmigración, una de sus banderas políticas más fuertes. Con promesas de mano dura y deportaciones masivas, el exmandatario busca ganar apoyo en las próximas elecciones presidenciales, apelando a su base electoral conservadora.
Sin embargo, sus afirmaciones han generado reacciones encontradas, especialmente en los estados y ciudades que ha señalado como focos de criminalidad migrante. En los próximos meses, el debate sobre la política migratoria será, sin duda, uno de los ejes centrales de la contienda electoral.
El expresidente Donald Trump ha vuelto a poner el foco en la inmigración, atacando duramente las políticas actuales y prometiendo una línea mucho más estricta si regresa a la Casa Blanca. Con un discurso centrado en la criminalidad y la supuesta invasión de migrantes venezolanos, Trump busca movilizar a sus seguidores en torno a su agenda de seguridad y control migratorio, marcando así uno de los temas más divisivos de cara a las elecciones de 2024.