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Las acciones de VF Corp. (VF), propietaria de The North Face y Vans (entre otras marcas), cayeron ayer lunes después de que la compañía informara que un hackeo había afectado su capacidad para cumplir con algunos pedidos antes de las vacaciones.
La empresa dijo que los piratas informáticos cifraron «algunos» sistemas y se llevaron datos personales. Estos son algunos indicadores de ransomware, donde los atacantes intentan extorsionar a las empresas a cambio de un pago sustancial. VF Corp. declinó comentar si el incidente fue un ataque de ransomware.
La acción cerró con una caída de más del 7% ayer lunes.
VF Corp. (VF) anunció el incidente el mismo día en que entraron en vigor las nuevas normas de divulgación cibernética de la Comisión de Valores y Bolsa de EE. UU. Estas regulaciones exigen que las empresas informen sobre «incidentes cibernéticos materiales» a sus inversores dentro de los cuatro días posteriores a determinar que un hackeo tendría un efecto en sus resultados financieros. VF Corp. identificó por primera vez a los piratas informáticos en su sistema el 13 de diciembre, lo que significa que tomó relativamente poco tiempo para que la empresa identificara la amenaza como material.