EL VENEZOLANO COLOMBIA | NOTA DE PRENSA
El Instituto Italiano de Cultura de Caracas en colaboración con el Teatro Teresa Carreño presentará el espectáculo de danza contemporánea Traviata, inspirado en la Ópera de Giuseppe Verdi, el compositor italiano más querido.
En este espectáculo llevado a cabo por Monica Casadei – ecléctica coreógrafa italiana formada en Italia, Inglaterra, Francia y con varias estadías en Oriente- el cuerpo del bailarín se convierte en el instrumento para traducir, realizar y transformar el poder evocador de la Ópera y la música de Giuseppe Verdi.
A través de los gestos vigorosos y enérgicos que siempre caracterizan el lenguaje de Monica Casadei, el cuerpo de la bailarina absorbe la pasión, el dolor y el dramático final de la historia de Violetta y Alfredo, en un espectáculo que es una crítica social a una sociedad machista que no le permite a las mujeres (representadas por Violetta), expresarse libremente.
Esta única función de Traviata nos muestra la visión de Violetta contra todos, una historia marcada por un sentimiento de fin. Danza y Ópera se funden creando un flujo de imágenes que no tiene ninguna coherencia didascálica, y que, sin embargo, están estrictamente relacionadas con la tragedia de Violetta.
Traviata es un espectáculo de danza contemporánea que es quizá el más conocido e icónico de Monica Casadei, que sigue representándose en Italia y en todo el mundo después de 11 años de su estreno. En Traviata, el personaje de Violetta está al centro de una sociedad machista. Violetta, se ve perjudicada por las reglas sociales que son expresión de las ideas del padre de Alfredo, Giorgio Germont, un emblema de una sociedad con una moral malsana. El espectáculo es una crítica contra una sociedad hipócrita, conformista y machista, a partir del punto de vista feminista de Violetta quien aspira a una libertad de afirmación de sí misma.
Fecha del evento: jueves 21 septiembre
Hora: 07:00 p.m.
Duración: 80 minutos
Lugar: Teatro Teresa Carreño, sala José Félix Ribas
Costo: 10$ (Entradas a la venta en la Taquilla del Teatro y a través de https://www.maketicket.com.ve/evento/traviata)
Única función
ESTRUCTURA DE LA OBRA
Traviata es un viaje coreográfico en el que danza y ópera se funden en un flujo de imágenes, sin el propósito de adherirse a la ópera original en sí, pero sin perder la conexión con el drama de Violetta. Un viaje en el que vibra el sentimiento amoroso de quien espera, trágicamente unido al sentimiento de saber que todo acabará, mientras se consuma el conflicto entre individuo y sociedad, fachada pública y sentimiento privado.
Una Traviata leída desde el punto de vista de una Violetta contra todos, en el centro de una sociedad machista representada por un cuerpo de bailarines vestidos de negro. Violetta multiplicada en tantos elementos femeninos, despreciada, que anhela, aunque enferma, aunque cortesana, algo puro. Violetta contra la que se lanzan las reglas sociales expresadas por el padre de Alfredo, Giorgio Germont, emblema de una sociedad de moral malsana. Una sociedad en la que, en cierto modo, la sociedad actual también se puede ver reflejada.
En el espectáculo, Violetta baila entre otras Violettas, vestida con una falda blanca, que es la falda de la celebración, que se expresa con la famosa frase: «libiam ne’ lieti calici», pero que también es símbolo del dolor, evidenciado a través de un baile en solitario, de espaldas, que representa la soledad, un viaje hacia la muerte. En el espectáculo, los trajes de Violetta tienen diferentes significados de acuerdo con su color, vestida de blanco para significar la búsqueda de pureza, y vestida de rojo, como representación de su corazón sangrante. Una historia en la que el sentido del final de las cosas se intuye en cada brindis, y en la cual detrás del vals se esconde el mal que aguarda. Detrás de las fiestas y de las formas, la podredumbre de una sociedad en venta, vacía.
Para Casadei y sus colaboradores, la representación de la Traviata significa entrar en el drama de Violetta, de esta mujer a la que se le niega la esperanza del amor. Porque, si como prostituta, feliz de su condición, hubiera podido integrarse a escondidas en la sociedad, como cortesana animada por el deseo de escapar a su destino, no podía sino ser castigada por la enfermedad, por la muerte, por el desprecio. Asesinada por la hipocresía del coro. Alfredo es en la obra un hombre poco profundo, anulado por las acciones de su padre; y de hecho él también pertenece al coro. En el espectáculo, se le evoca más por la escena de la fiesta en casa de Flora que por sus declaraciones de amor.
La famosa frase de la ópera «Es tarde» se convierte en la clave de la interpretación de Traviata de la compañía Artemis Danza. Dos palabras que resuenan como campanadas que anuncian la muerte. Porque nada se puede recuperar. Violetta, con un vestido rojo, baila y de su corazón no puede sino gotear sangre, sangre que es por la tuberculosis pero que también es signo de una herida interior de la que no hay escapatoria. La sociedad que todo lo ve y todo lo controla quiere su sacrificio: «Sí, llora, oh desdichada».
Esta visión en blanco y negro, manchada por el color rojo y el dolor, termina con el famoso grito: «Ámame, Alfredo«, que escuchamos en una mezcla de varias ediciones famosas, una invocación que es un grito de muerte. De hecho, al contrario que en la ópera, donde escuchamos «Ámame, Alfredo» tras el encuentro decisivo entre Violetta y el padre de Alfredo, en la representación esta invocación se traslada al final. Un grito de desesperación, un grito de soledad, en una Traviata muy femenina en la que la partida se juega a través de la explosión de una energía física de dolor, que es el espejo del alma.
CRÉDITOS
Coreografía, dirección, decorados, luces y vestuario: Monica Casadei
Música: Giuseppe Verdi
Elaboración musical: Luca Vianini
Dramaturgia musical: Alessandro Taverna
Producción: Compagnia Artemis Danza/Monica Casadei
Coproducción Fondazione Teatro Comunale di Ferrara con la contribución del Ministerio de Cultura italiano