EL VENEZOLANO COLOMBIA | SWISSINFO
Un total de 2,5 millones de personas recibieron, entre enero y noviembre de 2022, algún tipo de ayuda en Venezuela, según un reporte publicado este miércoles por la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, en inglés) de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Del total de beneficiarios, la OCHA detalló que 1,09 fueron adultos entre los 18 y 59 años, 861.000 fueron niños y adolescentes, y 590.000 personas mayores de 60 años.
La organización indicó, en un gráfico, que 2,4 millones de personas recibieron asistencia sanitaria, 1 millón han tenido acceso a agua potable, saneamiento e higiene, 459.000 recibieron suplementos relacionados con la nutrición, entre otros apoyos, entendiendo que hay casos en los que un beneficiario obtiene más de una forma de ayuda.
Estas entregas a personas con necesidades urgentes, enmarcadas dentro del Plan de Respuesta Humanitaria que ONU aprobó el año pasado, se han concretado en 327 de los 335 municipios del país.
146 ORGANIZACIONES HAN ENTREGADO LA AYUDA HUMANITARIA
La asistencia ha sido llevada a cabo por 146 organizaciones, de las cuales 98 son nacionales, 27 internacionales, 11 programas pertenecientes a la ONU con presencia en Venezuela, 2 vinculadas a la Cruz Roja y otras 8 no especificadas.
El Fondo Humanitario de Venezuela (FVH), una instancia de las Naciones Unidas, informó este miércoles de una asignación de 5,9 millones de dólares entregada el pasado diciembre a organizaciones no gubernamentales del país caribeño para el desarrollo de proyectos de asistencia a personas con necesidades urgentes.
El FHV, que recibe donaciones internacionales para el país sudamericano, explicó, a través de una infografía, que el dinero recientemente entregado ayudará a 55.933 personas en los estados Amazonas y Apure (fronterizos con Colombia) y Sucre (noreste).
Las intervenciones se harán en 11 municipios «donde hay una incidencia alta de trata de personas y violencia, así como una falta de servicios básicos, y una pérdida de medios de vida que incrementa los niveles de vulnerabilidad y los riesgos de protección de los grupos más vulnerables», señala el escrito.