EL VENEZOLANO COLOMBIA | SEMANARIOUNIVERSIDAD.CR
Se prevé que las personas migrantes venezolanas que se encuentran en Costa Rica podrán continuar su tránsito hacia el norte después de que un juez estadounidense eliminó la polémica medida migratoria conocida como Título 42, que desconocía la posibilidad de solicitar asilo al llegar a la frontera en Estados Unidos.
Cientos de personas migrantes venezolanas permanecen en el país sin una visión clara sobre su futuro y sin recursos económicos, después de que el 13 de octubre el Gobierno estadounidense volvió a aplicar el Título 42, que permite que se expulse a México a toda aquella persona que ingrese a Estados Unidos por la frontera terrestre sin documentos migratorios.
No obstante, los albergues que se encuentran en la frontera de Estados Unidos y México se preparan para un eventual cruce masivo de migrantes tras el previsto fin del Título 42 el próximo 21 de diciembre y anticipan que el número de migrantes que cruzan la frontera se incrementará drásticamente. Esperan recibir entre 1.000 y 2.000 migrantes por día, según reportes de la agencia Efe.
El Título 42
En los primeros días de la pandemia por el Covid-19, durante la administración de Donald Trump, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos emitieron una orden de salud pública, que permitió a las autoridades expulsar rápidamente a los migrantes en las fronteras terrestres y prohíbe la entrada de ciertas personas que «potencialmente representan un riesgo para la salud».
Esta orden emitida el 20 de marzo de 2020 se ha extendido varias veces, se conoce como Título 42 y ha sido ampliamente criticada por organizaciones defensoras de migrantes.
La administración de Joe Biden pidió derogar la legislación, pero un juez federal le impidió darle fin, por lo que el 12 de octubre su administración lanzó un programa para que 24.000 venezolanos pudieran entrar a Estados Unidos únicamente si llegan en avión y con un patrocinador. Esto dejó a muchas personas migrantes venezolanas en tránsito varadas en el camino, ya que el Gobierno estadounidense siguió aplicando el Título 42.
Sin embargo, el 15 de noviembre, el juez federal Emmet Sullivan dictaminó que el gobierno estadounidense no puede recurrir a la norma para bloquear la entrada de migrantes que solicitan asilo en las fronteras terrestres y consideró que la medida es «arbitraria» y viola las normas federales. El juez dio una prórroga hasta el 21 de diciembre al Gobierno, para eliminar la norma y buscar alternativas a cómo enfrentar el gran número de personas en la frontera.
A partir del 21 de diciembre, si una persona migrante cruza la frontera estadounidense, se deja detener y le dice al oficial de la Patrulla Fronteriza que teme por su vida y solicita asilo, no lo pueden expulsar. A estas personas se les puede abrir un proceso para ver si son elegibles o no para recibir la protección de asilo.
Se seguirá brindando atención humanitaria
Se consultó a la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME) cuál va a ser el proceder del Gobierno costarricense con los migrantes venezolanos a partir del fin de la política migratoria del Título 42 el 21 de diciembre.
La DGME indicó que que la política migratoria costarricense no depende de las acciones de otros países y que la institución continuará brindando la atención humanitaria a esta población “en tránsito”. Sin embargo, reiteró que “para la permanencia en el país toda persona extranjera debe cumplir con la normativa migratoria”.
La DGME también aclaró que las personas que se encuentran en las estaciones migratorias en el país, como el Centro de atención temporal para migrantes en la Zona Sur no se encuentran en condición de aprehendidas, por lo que “pueden continuar el recorrido si así lo desean”.