EL VENEZOLANO COLOMBIA | EL TIEMPO
Carlos* y su amigo Pedro* compraron un plan turístico para Cancún en México con la emoción de pasar unas vacaciones inolvidables, aunque cortas. Pero, cuando llegaron al país, los oficiales de las oficinas de migración les pidieron toda la documentación del viaje y pudieron comprobar que todo estaba en regla.
“Nos metieron a la oficina y se dieron cuenta de que todo estaba bien. Y ahí nos dijeron que nos iban a hacer una segunda entrevista”.
En ese lugar, una zona de transición, vieron a unas 300 personas tiradas en el piso. “Nos decían que estaban en esa sala desde hace dos o tres días. Nosotros llegamos a las seis de la mañana y el primer bocado de comida que probamos fue a las 9 de la noche”. Los viajeros denunciaron, además, que les robaron los dólares y que otras personas contaban que se les perdían los celulares y otras pertenencias.
Incluso, conocieron la historia de una familia con tres niños. “Los niños tenían hambre, y como hicieron el reclamo los sacaron a las malas y los llevaron a un calabozo. Las condiciones eran inhumanas. El baño olía horrible, no hacen aseo y lo único es que prenden el aire acondicionado al límite para que la gente se muera de frío”.
Incluso menores de edad padecen los malos tratos de los oficiales de migración en México.
Foto:
Archivo particular
Ellos grabaron varios videos de la situación ya que, por lo general, les quitan los celulares a los viajeros para que no puedan filmar nada. Los viajeros entienden que un país tenga la discreción de dejar o permitir el ingreso a quien consideren, pero, primero, reclaman que no se les avise antes de pagar costosos planes vacacionales y, segundo, no comprenden por qué estos abusos siguen ocurriendo sin que nadie se pronuncie al respecto.
“¿Por qué le quitan a uno las pertenencias?, ¿por qué te tratan mal?, ¿por qué lo hacen dormir a uno en el suelo? ¿Hasta cuándo esta situación va a ocurrir?”. Las víctimas van a interponer una denuncia formal.
*Nombres cambiados por solicitud de las víctimas.