EL VENEZOLANO COLOMBIA | FUPAD
Este fin de semana, la Fundación Panamericana para el Desarrollo (Fupad o Padf por sus siglas en inglés), ONG afiliada a la Organización de Estados Americanos (OEA), lanzó la campaña “Ser pana es ser parce, iguales por siempre” para fomentar la igualdad e inclusión de los más de 1,8 millones de migrantes venezolanos refugiados en Colombia.
La campaña que se realiza en el marco del programa ‘Integrando Horizontes’, auspiciado por la Oficina de Población, Refugiados y Migración (PRM) del Departamento de Estado de Estados Unidos, parte de cifras que evidencian la discriminación que vive esta población a razón de su nacionalidad.
El Barómetro de Xenofobia reportó que durante el primer semestre de 2022, la tasa de xenofobia fue de 17% frente a 15% en 2021. De igual forma, indicó que durante 2021, en redes sociales se publicaba un promedio diario de 154 mensajes con contenido que incluía estereotipos, prejuicios xenófobos y llamados a la acción en contra de la población migrante venezolana en Colombia.
En este contexto, la Fupad resaltó la necesidad de fortalecer la comunicación y tornarla en mensajes positivos que generen apoyo y sana convivencia, sin importar la nacionalidad. Por ello, “Ser pana es ser parce, iguales por siempre” le apunta a alcanzar este objetivo y promover la integración con este grupo poblacional y que los indicadores bajen.
Gloria Pinzón, Program officer en Fupad, destacó que “A través de la campaña ‘Ser pana es ser parce, iguales por siempre’ promovemos la igualdad e inclusión de todos los migrantes venezolanos, quienes al igual que nosotros, tienen los mismos derechos y deberes. De esta manera, hacemos un llamado para que entre todos construyamos un mejor país, basado en el respeto y la convivencia en armonía. Además, es necesario entender que los actos negativos no están asociados a la nacionalidad, es un pensamiento que hay que eliminar, de donde venimos, de donde nacemos no debería ser un calificativo en términos de discriminación”.
Pinzón también señaló que esperan que Colombia sea un ejemplo para otros países en los que han llegado más de 5 millones de refugiados venezolanos que han salido de su país, en su mayoría involuntariamente, debido a la situación social y política que atraviesan.
La fundación recalcó que a pesar de los niveles de discriminación, también hay historias y hechos que reflejan que no importa la nacionalidad. «Lo más importante es el respeto, la empatía y el apoyo para convivir en armonía, en un país en donde todos caben, en un país en el que ser pana es ser parce», dijo la Fupad a través de un comunicado.
Uno de estos hechos es que con corte a marzo, según las estadísticas del Registro Único de Trabajadores Extranjeros en Colombia (Rutec) del Ministerio de Trabajo, 35.969 migrantes venezolanos han sido vinculados a más de 7.000 empresas de 10 sectores principales de la economía colombiana.
Y frente a las miles de historias de personas venezolanas que llegan a Colombia con la expectativa de un nuevo comienzo y han logrado una buena relación con colombianos, destacan el caso de de Yeniré Sánchez, una mujer venezolana que migró hace siete años, y que en momentos difíciles como los de la pandemia pudo compartirle a sus vecinos, colombianos y venezolanos, parte de los mercados que recibía.
Otra historia es la de Bárbara Rivera quien cuenta que sus vecinas colombianas se convirtieron en su familia, se han apoyado entre ellas el cuidado de sus hijos y ella les ha enseñado sobre cocina y manualidades de su cultura venezolana.
Con ‘Ser pana es ser parce, iguales por siempre’ la Fupad espera que se respeten los derechos de los migrantes venezolanos y se mitiguen los pensamientos, acciones de xenofobia y discriminación que se presentan en medios de comunicación, entornos educativos para generar conciencia sobre la igualdad como base para construir un mejor país.
