Por: Miguel Ángel González |El Venezolano Colombia
Zharick Cervantes Faria, de 21 años, cuenta su testimonio de vida al participar en la comparsa África Mía en el Carnaval de Barranquilla 2022.
Ella fue una de las bailarinas que integró la comparsa África Mía durante el desfile de la tradicional Gran Parada de Fantasía del Carnaval de Barranquilla 2022.
Ese lunes 28 de marzo amaneció con un sol radiante, que irradió el esplendor y alegría de su gente, en la fiesta cultural más importante que tiene Colombia.
Más de 100 comparsas integradas por niños, niñas, jóvenes y adultos bailaban con entusiasmo para el público que plenó los palcos del Cumbiódromo de la Vía 40.
Entre esos bailarines llamó la atención de los espectadores una delgada muchacha con una discapacidad motriz, que bailaba con entusiasmo, soltura, elegancia y fuerza al ritmo de la música.
Tres días antes (el viernes), se presentó en la coronación de la reina Valeria Charris Salcedo y el sábado participó en la Batalla de Flores.
“Yo ni me imaginaba conectar con tantas personas, cuando ese lunes arranca el desfile y voy bailando y disfrutando, la gente empieza a gritarme cosas divinas, ´que linda´, ´que bailaba súper bien¨ , ¨que lo hacía increíble¨, que se sentían inspirados, admirados hacia mí. Me abrazaban, me besaban, se tomaban fotos conmigo, me pedían fotos y muchísimas cosas que jamás me imaginé.”, dice con satisfacción.
Intervención quirúrgica con una amputación transhumeral
“Era un sueño presentarme en una comparsa en el Carnaval por mi problema de salud, nunca había podido hacerlo. Los médicos me decían que no lo hiciera para evitar un golpe o una caída; pues ese brazo me hacía cierto peso, era del doble del grosor de mi brazo izquierdo”, dijo.
Apenas recién cumplía un año que le habían amputado el brazo derecho, exactamente el 17 de enero del 2021, le hicieron la intervención quirúrgica con una amputación transhumeral, quedando con un tercio de muñón; pero con dedicación y el entusiasmo que la caracteriza, en el mes de agosto ya inscrita en la comparsa África Mía para hacer su debut en el Carnaval 2022.
Pero si nos regresamos un poco más el tiempo, sabremos que sufrió de muchos problemas circulatorios desarrollados a lo largo de su crecimiento que generan infecciones debido a la patología de hemangioma congénito en miembro superior derecho que se vio reflejado al nacer.
A los seis años le habían extirpado un tumor benigno, que estaba inmerso en dos de sus dedos de la mano que debieron amputar.
“A finales del 2020 los médicos me dicen que ya no hay absolutamente nada qué hacer. Debido a la trombosis que presenté podía comprometer otros organismos de mi cuerpo y había una cierta posibilidad de perder la vida. Era eso o amputarme el brazo”, explica.
Zharick estudia noveno semestre de Derecho en la Universidad Autónoma del Caribe y trabaja en una dependencia jurídica y en la Secretaría Jurídica de la Alcaldía Distrital de Barranquilla.
“El baile para mí es un hobby, yo no me dedico profesionalmente a eso, simplemente es algo en lo que he desarrollado a lo largo de mi vida por mero gusto”, expresa orgullosa.
“Para mí eso me llenó de nostalgia, fue algo que no me imaginé y que hice por gusto. Conectarme con tanta gente fue muy lindo Estaba llena de felicidad y sentimientos, que ni sentía el cansancio de la emoción que tenía», añade.
El sueño en la Gran Parada de la Tradición
En la Gran Parada de la Tradición, los palcos del Cumbiódromo de la Vía 40 estaban repletos de barranquilleros y visitantes. Allí sus padres veían cumplir el sueño de Zharick. “Mi familia es mi vida, son mi mundo, mi motor mi vida entera. Mis papás me apoyan demasiado. Ellos orgullosos, estuvieron en primera fila esperando que yo pasara. Mis papás son todos para mí», resaltó Zharick, quien es la mayor de tres hermanos.
“Ese lunes, me seguían en Instagram, ya me reconocían, y me llamaban por mi nombre, me gritaban Zharick, Zharick, allí viene Zharick entonces me llamaban, me aplaudían, me gritaban fue algo muy increíble muy divino, yo estaba obviamente con la adrenalina al mil. Entonces me sentía atacada de felicidad. Fue un sueño. Sentía que tenían que pellizcarme porque estaba dormida en el sueño. Fue muy increíble, muy perfecto. Todo ha sido muy maravilloso, en ese desfile conseguí personas increíbles que me decían cosas muy maravillosas. Yo iba en lo mío, pero eso les gustaba a las personas y me sentía muy feliz por eso”.
La joven Zharick añade que “las personas por lo general no se esperaban que una persona con discapacidad motriz saliera en un desfile tan exigente como ese, pero ajá yo tuve mi preparación y todo lo pertinente para ello”.
“La vida es un ratico y ese ratico tenemos que disfrutarlo”
“En la vida no hay limitaciones, yo toda mi vida he vivido con una enfermedad en mi brazo, una enfermedad que me mandó Dios. Pocas personas nacen con ese tipo de hemangioma; no es tan común. Todos tenemos un propósito en la vida, no se dejen llevar por lo que dicen las demás personas porque muchas veces pensamos en lo que nos van a decir los demás”.
La estudiante de Derecho, reafirma que “la vida es un ratico y ese ratico tenemos que disfrutarlo al 100 por ciento ya que vemos muchas cosas, hoy en día, de suicidios y más que todo en la juventud. Entonces nos toca encontrar nuestras pasiones y desarrollarlas a grandes rasgos”.
Zharick destaca que, aunque los médicos “me decían que yo no podía bailar previniendo de un golpe o de una caída, pues yo lo hice, no sé si estuvo bien o estuvo mal, yo solamente seguí mi corazón en lo que yo quise.
Lo único que quiero y siento que es el camino que he tomado es el de inspirar a las demás personas que haya lindo y positivo en la vida, a pesar de cualquier tipo de problemas, porque no tiene que ser una discapacidad, puede ser un problema emocional físico o alguna cualidad que no le gusta a la persona, etc. Tal vez por eso es que he conectado con tantas personas haciendo lo que me gusta, es lo que demuestro felicidad. Obviamente el camino no es fácil.
Después de cumplir este sueño veré si vuelvo a meterme en una comparsa
Hay situaciones en la vida que son inmodificables, pero como tú las enfrentas es lo que cambia. Estés triste o feliz la situación va a ser siempre la misma situación, entonces en este caso yo no puedo hacer nada, si me echaba a llorar igual la vida iba a pasar encima de mí. Si me ponía feliz iba a disfrutar mi vida, entonces eso es lo que estoy haciendo. Aunque nadie quiere pasar por algo similar, pero si Dios lo puso en mi camino fue por algo. El cielo nada más es el límite, más nada.
El Carnaval siento que es alegría, felicidad, regocijo y gozo. La persona que viene a Barranquilla a vivir el Carnaval siempre va a querer volver porque es algo que está inmerso en muchos sentimientos. Todo esto nos lleva a querer vivirlo. En mi caso lo quería vivir caminando y bailándolo en la vía 40. Después de cumplir este sueño veré si vuelvo a meterme en una comparsa porque yo tengo planes, metas y sueños agregados a mi carrera profesional, pues que sea lo que Dios quiera”.
◉ Sigan la cuenta e Zharick en Instagram: @z_faria