E l Día de la Madre, que en Colombia se celebra el próximo domingo, tiene en incertidumbre al sector de floricultores del país que no prevé un repunte del gremio por la crisis del coronavirus SARS-CoV-2, alertó este jueves la Asociación Colombiana de Exportadores de Flores (Asocolflores).
«La temporada del Día de la Madre en medio del coronavirus este año ha sido extremadamente difícil para la floricultura colombiana. No solamente se disminuyeron los pedidos, si no que la capacidad de transporte aéreo fue menor y las tarifas más altas», dijo el presidente de Asocolflores, Augusto Solano.
De acuerdo con Solano, el descenso de los pedidos también supondrá una «reducción significativa en las exportaciones para esta temporada».
El Día de la Madre es, junto a San Valentín, la fecha más importante del calendario de exportación de los floricultores en Colombia, sin embargo, luego de esta celebración las ventas generales decaen porque con la llegada del verano a Estados Unidos y Europa, cada país inicia su temporada de cultivos de flores a cielo abierto.
Solano explicó que esas son las dos temporadas más importantes para la floricultura del país porque durante los primeros cinco meses del año, el sector «recoge, además, la caja necesaria para afrontar la temporada de verano que es muy baja en ventas».
EL NEGOCIO SE SOSTIENE
Pese a esas dificultades, Asocolflores informó que gracias al esfuerzo de toda la cadena de producción, se ha logrado atender la mayor cantidad de pedidos solicitados.
«Nuestras flores este domingo estarán en muchos países y también en Colombia para que las madres celebren su día con la diversidad y la belleza de las flores de Colombia», agregó Solano.
El sector floricultor fue el primero en sufrir las consecuencias de la pandemia en Colombia, debido a que con el reporte de contagios en China, las órdenes se fueron cancelando paulatinamente, primero en Europa y luego en Estados Unidos y Canadá.
Sin embargo, el sector ha podido salvar los 140.000 empleos formales que genera en Colombia, aunque advierte que se requiere una estrategia que asegure liquidez en el futuro inmediato.
«El futuro del sector está condicionado a la reactivación de sus mercados en la medida en que estos se vayan abriendo. Algunos países de Europa comienzan a abrir sus economías, pero de manera muy lenta. En Estados Unidos los grandes supermercados han sido los más activos y las floristerías en varios estados están empezando a abrir», acotó Solano.
Al igual que otros sectores de la producción, el floricultor se ve golpeado por los efectos de la pandemia que ha obligado al confinamiento y con ello la restricción de las actividades sociales y celebraciones.
«Sabemos que los resultados del Día de la Madre estarán por debajo de lo presupuestado y por ello hemos solicitado al Gobierno, a través del Consejo Gremial Nacional, otorgar subsidios a los salarios de las empresas más afectadas y no préstamos», concluyó Solano.